En su edición número 20, Expovinos 2025 no solo estrenó formato: también confirmó por qué es considerado el escenario más influyente del vino en Colombia y un referente obligado en América Latina.
Durante cuatro días, expertos, aficionados y curiosos se dieron cita para conocer lo mejor de la viticultura mundial, en un espacio donde la copa se convierte en lenguaje común.
El momento más esperado fue la premiación de los 33 vinos galardonados en catas a ciegas, una práctica que preserva la imparcialidad y resalta las virtudes de cada etiqueta.
Bajo la dirección de José Rafael Arango referente en el mundo del vino, un jurado especializado evaluó más de 200 referencias en 16 categorías, calificando con rigor sus atributos de color, aroma y boca.
El resultado fue un retrato de diversidad: desde el Rosado Gris, que conquistó el oro como Mejor Vino Rosado, hasta íconos consolidados como Callia Malbec y Séptima, los más vendidos en su categoría en Colombia.
Los países con mayor tradición vitivinícola —Chile, Argentina, España, Italia y Francia— volvieron a dominar el podio, aunque también hubo espacio para etiquetas exclusivas de la casa.
Entre los nombres destacados sobresalieron Alamos Cabernet Sauvignon, coronado como Mejor Cabernet; Danzante Chianti Toscana, en la categoría italiana; Castillo de Molina Chardonnay, en blancos; y el elegante Gerard Bertrand Cabernet Reserve, representante de Francia.
La sorpresa fue el Undurraga Gewurztraminer, elegido como vino revelación del año.
Para Arango, el valor de esta premiación es innegable: “Las catas a ciegas son un referente para el consumidor. Le entregamos al público una guía confiable que le permite elegir vinos de excelente calidad en diferentes rangos de precio, estilos y orígenes”.
Con esta selección, Expovinos 2025 no solo celebra a los mejores vinos, sino también la madurez del consumidor colombiano, que cada vez exige más diversidad, autenticidad y excelencia en su copa.