El fotógrafo cartagenero falleció este martes a los 94 años en Estados Unidos, país donde residía.
El fotógrafo cartagenero Nereo López-Mesa, considerado como uno de los más célebres del país en esta profesión, falleció este martes en Estados Unidos a sus 95 años de edad.
Así lo confirmó el Ministerio de Cultura en su cuenta oficial de twitter, donde expresó sus condolencias a la familia del artista y resaltó su labor.
Por su parte el escritor colombiano Alberto Salcedo Ramos expresó a través de su cuenta de Facebook: Paz en la tumba del maestro Nereo Lopez Meza, que acaba de morir. Se fue un grande. Un hombre que tenía el mar en los ojos y toda la gracia Caribe en la risa. Un fotógrafo portentoso que viajó, olió, entendió, dejó memoria.
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Por su carácter de trotamundos, Nereo tuvo la oportunidad de recorrer varios países y servir como corresponsal y reportero gráfico de diferentes medios como O Cruzeiro de Brasil, Cromos, El Espectador y El Tiempo. Su voluntad de innovación lo llevó a estar siempre en la vanguardia del oficio.
En un texto de la Biblioteca Nacional lo describen como un testigo excepcional de las transformaciones del siglo XX y comienzo del XXI. Él mismo representa o encarna el modelo del fotógrafo (viajero, explorador), y el desarrollo de la técnica y mirada clásica de un género descrito como fotoperiodismo. Nereo tuvo la suerte de coincidir y compartir con el 'grupo de Barranquilla, un conjunto de escritores, artistas e intelectuales ilustres.
Cabe recordar que de ese grupo hicieron parte personajes como Álvaro Cepeda Zamudio, Gabriel García Márquez, Alejandro Obregón y Julio Mario Santo Domingo, entre otros.
En una de sus últimas entrevistas con el diario El País, ante la pregunta de ¿cuál era el secreto del buen fotógrafo?, Nereo respondió: muy sencillo. Ser intuitivo y tener poder de observación. Yo sé que soy un buen observador y veo cosas que los demás no ven. ¡Esa es la diferencia! Hay fotógrafos muy buenos y fotógrafos menos buenos, pero los muy buenos saben ver más. El equipo y las películas son los mismos; las cámaras digitales o no son las mismas, unas con más capacidad y otras con menos, pero todo radica en el poder de observación.