La propuesta reciente del Gobierno Nacional de tener un precio diferencial para la gasolina, que se le venda a los taxistas del país, no gustó mucho entre los distribuidores del combustible y entre otros gremios.
Para José Alberto Arias, vocero de Fendipetróleo, la tarifa diferencial no debe ser solo para el sector de los taxistas, sino que esta medida debe cubrir a todo el país.
“Hemos analizado la situación y hay una profunda desazón por parte de los distribuidores minoristas, porque eso va a requerir de altas inversiones y aún no se conoce cómo se va a implementar ese programa”, añadió.
Recalcó que desde el punto de vista operativo esta iniciativa es muy difícil de llevar a cabo, porque las 6.200 estaciones de servicio que hay en el país, tendrían que acondicionar islas exclusivas para esta tarifa preferencial.
De igual manera, Julio César Vera, presidente de la Fundación Xua Energy, dijo que con tecnología, a través de chips, se podría manejar una tarifa diferencial en el precio del combustible, pero dijo que se tendría que implementar un software y hardware especializado para ello en las estaciones y los chips, en los vehículos.
Coincide en que esto sería costoso y se requeriría necesariamente de controles en campo para evitar distorsiones.
“Por supuesto que se generarían incentivos a la ilicitud y para el sector de combustibles y, en especial, para las estaciones se complejiza su operación, dado que les implicaría tener que reforzar sus controles sobre su personal y sus equipos para evitar adulteraciones y dependiendo del nivel del diferencial, los incentivos a la ilegalidad podrían ser mucho mayores”.
Por ello no cree viable esta propuesta, ya que sería costosa, de difícil control y “por esa vía rápidamente terminaríamos en que todos los sectores van a tener un argumento para pedir lo mismo. Es mejor pensar en otro tipo de medidas para mejorar estructuralmente la competitividad del sector y no vía de uno de sus insumos, lo cual genera otras ineficiencias operativas en consumo y costos tecnológicos para poder controlar y focalizar la medida”.
¿Cómo funcionará la medida?
El ministro de Transporte, William Camargo reiteró que lo que se busca con la medida, anunciada el fin de semana, es “permitir que los taxistas tengan un ahorro aproximado de $3.000 a $3.600 diarios”, en el costo del combustible.
Añadió que el descuento se haría a través de un código QR, un chip, o una especie de cupo mensual, que se cotejaría con los datos de los taxis, para garantizar que el subsidio llegue exclusivamente a estos vehículos.
Dichas herramientas tecnológicas pretenden rastrear y verificar los consumos de combustible e identificar cuantos kilómetros han recorrido, o quién es el propietario del taxi.
Actualmente el precio de la gasolina en Cali es de $13.997 por galón.