Cali pasó de ser un destino emergente a consolidarse como un referente turístico en Colombia y el exterior. Con más de tres millones de visitantes en 2024 y una proyección de 3,1 millones para 2025, la capital del Valle del Cauca se perfila como un núcleo de atracción para la inversión inmobiliaria en rentas cortas, un modelo en auge que combina competitividad y potencial de valorización.

De acuerdo con la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), el turismo deportivo y de negocios se ha convertido en motor de desarrollo económico y proyección internacional.

Eventos como el Festival Petronio Álvarez, la COP16 y la Feria de Cali han movilizado a decenas de miles de viajeros, mientras que el turismo de salud ubica a la ciudad como la segunda del país en recepción de pacientes internacionales, según Migración Colombia.

Cali es una ciudad 100% turística. | Foto: Alcaldía de Cali

Precios competitivos frente a otras ciudades

El auge turístico ha impulsado nuevas tendencias en el sector inmobiliario, en especial en las rentas cortas. Estas propiedades, destinadas al alojamiento temporal mediante plataformas digitales o modelos hoteleros estructurados, se consolidan como opción de alta rentabilidad para inversionistas nacionales y extranjeros.

Esteban Marín Lenis, especialista en el sector y CEO de Constructora Maring, explicó que Cali ofrece precios más competitivos que otras capitales: mientras en Bogotá y Medellín un inmueble para este mercado alcanza valores promedio de $500 a $600 millones, en Cali el rango de entrada oscila entre $230 y $260 millones.

“Esto significa que la ciudad aún está en una etapa previa a la consolidación del mercado, con incrementos sostenidos de valorización en el corto y mediano plazo”, señaló.

Cali tiene cerca de 4000 Airbnb. Su zona rural es de las más apetecidas. | Foto: El País

En el sur de la ciudad, sectores como Pance y Ciudad Jardín se posicionan como polos turísticos por su dinamismo gastronómico, universitario, clínico y deportivo. Sin embargo, más del 90 % de la oferta de rentas cortas en Cali sigue en la informalidad, lo que ha impulsado a empresas del sector a estructurar proyectos con Registro Nacional de Turismo y operación especializada.

Proyectos en marcha y potencial de expansión

Un ejemplo es el proyecto Dekat Guadalupe, ubicado cerca a la arena Cañaveralejo, que se vendió en su totalidad en el lanzamiento, confirmando la demanda por una oferta organizada de alojamiento temporal.

Actualmente, Constructora Maring desarrolla Dekat Pance, un complejo con infraestructura adaptada a la operación hotelera, que incluye lavandería industrial, zonas sociales y espacios para equipaje.

Su clima, su gente y el bosuqe que posee en medio de sus edificaciones, convierten a Cali en una ciudad soñada. | Foto: El País

El modelo implementado también busca facilitar el acceso a inversionistas primerizos, con planes de pago flexibles, asesoría financiera y posibilidad de aplicar subsidios. La operación centralizada garantiza que quienes adquieran las propiedades no tengan que asumir la gestión diaria, reduciendo las barreras de ingreso al mercado.

En comparación con Bogotá y Medellín, que cuentan con 15.000 y 13.500 inmuebles registrados en Airbnb, respectivamente, Cali apenas supera los 4.000. Esta cifra refleja el amplio margen de crecimiento de la capital del Valle en la oferta de alojamientos temporales y su potencial para consolidarse como uno de los destinos favoritos para este tipo de inversión en Colombia.

Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.