La discusión del salario mínimo para 2026 inicia formalmente este lunes 1 de diciembre con la instalación de la mesa de concertación en el Ministerio del Trabajo.
El proceso reúne al Gobierno, a las centrales obreras y a los gremios empresariales con el objetivo de definir el ajuste que regirá para más de 7,4 millones de trabajadores que hoy ganan el mínimo en Colombia.
Para esta primera jornada, las partes expusieron los elementos técnicos que marcarán el debate: inflación, productividad, costo de vida, informalidad laboral y capacidad de generación de empleo.
Aunque aún no hay cifras oficiales de propuestas, desde el sector sindical anticiparon que buscarán un aumento “de doble dígito”, mientras que varios gremios advierten que el incremento debe ser responsable y equilibrado para evitar presiones sobre el mercado laboral.
Por ahora, una de las cifras que guía la discusión es la propuesta por Gobierno Nacional, de una estimación preliminar que ubicaría el aumento alrededor del 11 %, lo que llevaría el salario mínimo a cerca de $1.580.085 sin auxilio de transporte.
No obstante, por el momento por parte de los empresarios todavía no hay una propuesta formal sobre la mesa y que las cifras definitivas dependerán de los datos actualizados de inflación y productividad.
La negociación se da en un contexto de desaceleración económica, presiones fiscales y un mercado laboral que aún no se recupera plenamente. Para los gremios, un aumento demasiado alto podría afectar la contratación formal, especialmente en pequeñas y medianas empresas.
Para las centrales sindicales, en cambio, es necesario un incremento robusto que compense la pérdida de poder adquisitivo acumulada durante los últimos años.
El Gobierno, en cabeza del Ministerio de Trabajo, afirmó que su propósito es lograr un acuerdo antes del 15 de diciembre. Sin embargo, como ha ocurrido en varios periodos, si no se alcanza un consenso antes del 30 de diciembre, el Ejecutivo tendrá la facultad de fijar el salario mínimo mediante decreto.
Más allá del cierre del debate, los expertos coinciden en que el ajuste tendrá un impacto directo sobre el consumo de los hogares, la competitividad de las empresas y la capacidad de recuperación económica del país.
Por ello, este año la mesa estará acompañada de sesiones técnicas adicionales para analizar proyecciones económicas, evolución del empleo y escenarios inflacionarios.
Las sesiones se extenderán durante diciembre, con reuniones programadas hasta el lunes 29 de diciembre, se espera que pese a las diferencias se logre una concertación que garantice el bienestar de los trabajadores.