Tras consagrarse como el máximo goleador del fútbol profesional colombiano, Dayro Moreno -quien ya hizo historia cuando, de la mano del entrenador Luis Fernando Montoya, ganó la primera y única Copa Libertadores que tiene el Once Caldas-, regresa a la casa de la selección Colombia, tras el llamado del técnico Néstor Lorenzo.

Acompañado de una camada de jugadores a quienes conoce bien, como es el caso de James Rodríguez, Moreno intentará hacerse con un puesto en la delantera, de cara a los enfrentamientos del equipo el próximo 4 de septiembre con Bolivia y el 9 de septiembre, con la selección de Venezuela.

Luego de conocerse el llamado por parte del técnico argentino, los fanáticos del fútbol en Colombia (no solo los del Once Caldas) se han expresado en las redes sociales, con mensajes de felicitación y nostalgia por lo que ha representado Dayro en el fútbol del país.

Conocido por su irreverente estilo, sus celebraciones y la infaltable frase con la que se convoca su presencia (“Dayro Moreno, Dayro Moreno, hay goles pa’ los nenes y hay goles pa’ las nenas”), el goleador ha despertado grandes ansias entre la fanaticada, quienes esperan volverlo a ver vestir la camiseta amarilla de la Selección después de una década por fuera de compromisos internacionales.

Esta vez, el escenario no podría ser más ideal: con la clasificación a un nuevo Mundial al alcance de las manos, Dayro Moreno llega a ratificar el favoritismo con que cuenta la selección Colombia desde hace varios años, y que se ha visto potenciada con generaciones por las que han pasado el eterno capitán Mario Alberto Yepes, el portero David Ospina y el delantero Radamel Falcao García hasta las figuras actuales Lucho Díaz y James Rodríguez Y Richard Ríos.

Dayro Moreno ya sabe que es marcar por eliminatorias. Imagen de la celebración de su gol contra Argentina por las eliminatorias al Mundial de Sudáfrica 2010. | Foto: COLPRENSA

Entre ellas, Dayro Moreno ha sido una figura permanente, presente desde la distancia, esperando el momento en el que le permitieran volver a brillar con la selección absoluta. Siempre un goleador que ha demostrado, torneo tras otro, las condiciones con las que cuenta, la cuota segura que siempre representa para los objetivos de los equipos para los que juega.

Pero la espera ha terminado. Hoy fue visto arribando a Barranquilla, la casa de la Selección Colombia, derrochando el estilo inconfundible de su figura frente a las cámaras. Allá espera ponerse a punto durante estos días de cara a lo que será un compromiso por el que todos los colombianos estaremos atentos.