Menos de nueve meses después de que el mundo del fútbol contuviera el aliento, esperando que Christian Eriksen recuperase el suyo, el danés ha vuelto a jugar con la selección, marcando un gol en la derrota (4-2) contra Holanda, en el amistoso jugado el sábado en el Johan Cruyff Arena de Ámsterdam.

Entrando desde el banquillo en el descanso, el mediocentro ofensivo del Brentford no esperó ni dos minutos, para en su segundo toque de balón, marcar un gran gol, con potencia desde dentro del área a la escuadra, lo que supone su 37º tanto en 110 partidos con la selección.

Eriksen ha protagonizado este regreso en el mismo terreno de juego en el que realizó sus primeros pasos profesionales, con la camiseta del Ajax a lo largo de cuatro brillantes temporadas, entre 2009 y 2013.

Durante la primera parte, Eriksen estuvo observando atento el partido desde el banquillo, como lo había previsto el seleccionador Kasper Hjulmand, y entró al terreno de juego después de la pausa.

Aplaudido por el público neerlandés y por el seleccionador de la 'Oranje' Louis van Gaal en su entrada al césped, Eriksen levantó las manos al cielo en señal de agradecimiento.

Incisivo y autor de varios gestos técnicos, además del gol golpeó el palo con un espléndido disparo lejano. A la vista saltaba que estaba disfrutando de su vuelta a la normalidad, luego del incidente acontecido el 12 de junio de 2021.

Ese día, Eriksen se desplomó en el minuto 42 del partido contra Finlandia en fase de grupos de la Eurocopa, y estuvo incosciente cinco largos minutos.

Después de haberse implantado un desfibrilador, Eriksen retomó los entrenamientos en Odense, con su club formador y después con la academia del Ajax, manteniendo la esperanza de poder retomar una carrera paralizada en sus mejores años.

Sin esa oportunidad en Italia, Eriksen quedó libre de su contrato con el Inter de Milán y firmó un contrato hasta final de temporada con el recién ascendido Brentford, equipo con el que ya ha disputado tres partidos en Premier League desde finales de febrero.