Debido a los comentarios suscitados en algunos medios de comunicación y redes sociales sobre el contrato firmado entre Saab y el Gobierno de Colombia, por la adquisición de aviones, la empresa sueca emitió un comunicado.
En él, señalan que el compromiso adquirido con Colombia es con un contrato que incluye la adquisición de 17 aviones, 15 Gripen E (monoplaza) y 2 Gripen F (biplaza), además de los equipos complementarios de cada aeronave, como: sensores avanzados, radares de alta precisión, simuladores, equipos de autoprotección y armamento moderno.
En este punto, Saab señaló que “Colombia no pagará de inmediato; el esquema financiero distribuye los costos durante los siete años del proyecto, protegiendo al país de variaciones inflacionarias y precios del mercado”.
Además de mencionar que tienen tolerancia cero hacia la corrupción y una política estricta que regula su conducta en línea con las directrices internacionales establecidas por la OCDE, la compañía también insistió en que “no hubo participación de personas externas o intermediarios en el proceso”.
Esto, al parecer, por las sospechas surgidas por la presencia de la exprimera dama Verónica Alcocer en Estocolmo, coincidiendo con el proceso de compra.
Por ello, afirmaron que toda la negociación y adquisición se llevó a cabo con representantes oficiales de la empresa y con la contraparte designada por Colombia, además de contar con el acompañamiento del Gobierno de Suecia.
Uno de los temas que ha llamado la atención, es el precio de los aviones. Según Colprensa, en 2013 Brasil compró 36 aviones Gripen en 4.500 millones de dólares, unos 125 millones de dólares por avión. Los adquiridos por Colombia, según reveló el presidente Gustavo Petro, habrían costado 215 millones de dólares por avión".
Ante esto, la empresa sueca recalcó que sus ofertas a distintos países no son comparables.
“En el caso de Colombia, es la primera vez que el país adquiere esta capacidad integral y nueva, siendo una solución completa y de vanguardia. Además, el alcance de cada contrato varía en cuanto a sistemas incluidos, nivel y sistemas de entrenamiento, repuestos, logística, simuladores, requisitos operativos, armamento, seguros, garantías y condiciones financieras”, argumentó Saab.
La empresa líder en defensa mencionó que parte de su compromiso con el gobierno colombiano incluye un paquete de cooperación industrial y transferencia de tecnología.
“Esto incluye la instalación de una planta de producción de paneles solares en la región del Caribe, mejoras en el sector de la salud y el suministro de agua potable para la región de La Guajira a través de plantas de desalinización”, señaló.
Además de la transferencia de tecnología dentro de las capacidades aeronáuticas y de ciberseguridad para la Fuerza Aeroespacial Colombiana.