La Provincia Eclesiástica de la Arquidiócesis de Popayán, que comprende las Diócesis Ipiales, Pasto, Tumaco; y los Vicariatos Apostólicos Tierradentro y Guapi, recibió con alegría al Nuncio Apostólico de Colombia, monseñor Paolo Rudelli.
Durante su visita, este máximo jerarca de la iglesia destacó la importancia de la fe y el servicio diario en la vida de los cristianos, buscando que las enseñanzas del evangelio aporten a la reconciliación de la región y el país.
De ahí que varios feligreses se congregaron en la parroquia Divino Niño Jesús de Praga y la Catedral Basílica Nuestra Señora de la Asunción en la participación de la Santa Eucaristía, el Clero Arquidiocesano, religiosas, integrantes del Seminario Mayor San José, indígenas, grupos apostólicos y feligreses vivieron un momento de fe y esperanza con la presencia del Nuncio Apostólico de Colombia.
En su homilía, monseñor Rudelli nos extendió el saludo del Santo Padre Papa León XIV y su bendición y durante la predicación reflexionó sobre la necesidad de tener un espíritu de fortaleza, amor y templanza en el servicio diario.
“Acercarse al Señor es un poco peligroso. Acercarse al Señor nos pone en cuestión”, expresó Rudelli. También invitó a reflexionar sobre la mirada compasiva de Jesús y a pedirle amor por nuestro prójimo, ya que “si los cristianos no tenemos este amor que sufre y arriesga, corremos el riesgo de apacentarnos solo a nosotros”.
El represente de la iglesia agregó que “Jesús nos enseña que la fe no se trata de hacer grandes obras o milagros, sino de servir con amor y humildad en el día a día. En su respuesta a los apóstoles, les invita a tener fe como un granito de mostaza, que aunque pequeño, puede mover montañas. También nos enseña que el servicio diario es fundamental para acercarnos a Dios y hacer maravillas en el mundo. Pensemos en cuántos niños encontrarán una sonrisa de los que están con ellos, cuántos encontrarán signos de afecto y amor, y cuántos pueden vivir porque hay gente que sirve a nuestras comunidades”.
Es que la visita del Nuncio Apostólico es un llamado a la unidad y la esperanza en la fe para una región con muchos obstáculos como el Cauca, por ello Monseñor Rudelli expresó su alegría al sentir en esta región una tradición católica tan arraigada y destacó la importancia de trabajar juntos para promover la evangelización y la reconciliación.
Mientras tanto, Monseñor Ómar Alberto Sánchez Cubillos, Arzobispo de Popayán, expresó su gratitud por la visita del Nuncio Apostólico y destacó la revitalización y la unidad de la Iglesia que esta visita ha traído a la provincia.
“Quiero expresar nuestra alegría y gratitud en estos días. Hemos tenido una oportunidad muy linda de recibir a nuestro querido Nuncio Apostólico aquí en nuestra Catedral Basílica Nuestra Señora de la Asunción y la parroquia Divino Niño Jesús de Praga Santander de Quilichao, Tumaco y Pasto”, agregó la máxima autoridad de la iglesia católica en la Ciudad Blanca.