Ministra de Transporte explica cuándo terminará la doble calzada a Buenaventura

El Valle del Cauca necesita finalizar las obras de la doble calzada a Buenaventura para elevar su competitividad. Y de paso contar en Cali con un sistema de transporte masivo bien financiado en su operación.

Frente a estos temas la ministra del Transporte, Ángela María Orozco, dijo en Cali que para la vía al puerto habrá una nueva concesión cuyas obras se contratarán en 2019.

Respecto al MÍO señala que se están estudiando soluciones, pues en su concepto a estos sistemas les ha faltado más apoyo.

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La ministra dijo que como una forma de fortalecer la vigilancia del sector se reformará la Superintendencia de Puertos y Transporte debido a su alto nivel de atraso.

¿Hacia dónde van los sistemas de transporte masivo en Colombia, pues todos sin excepción están desfinanciados, y por qué dice que el MÍO de Cali es un ejemplo?

Digo que es ejemplo (el del MÍO) por la solución a los problemas. Me refiero a qué encontré unos sistemas de transporte masivo en crisis, porque nadie había adoptado el concepto de cómo hacerlos sostenibles.

Los sistemas son en parte subsidiados por los gobiernos locales, las alcaldías y las autoridades regionales. Nosotros no los diseñamos ni estructuramos así y en el Plan Nacional de Desarrollo anterior se cambió el concepto de autosostenibilidad. Pero todavía es un hecho que nos enfrentamos a las decisiones de los alcaldes de turno sobre cómo lograr que su operación sea sostenible porque el Estado invierte el 70% en infraestructura mientras la operación debe tener un componente de subsidio.

El MÍO de Cali es un ejemplo en términos de las iniciativas que se han venido desarrollando y de las negociaciones con los operadores. Además, el nivel de responsabilidad sobre cómo se ha establecido el fondo de estabilización de tarifas.

¿Qué hacer entonces?

Infortunadamente los problemas en los sistemas de transporte masivo se fueron acumulando porque cuando los diseñaron se presumió que todos podían vivir del tráfico de pasajeros y tomaron como referente la troncal de la Caracas.

Lo cierto aquí es que las realidades locales son distintas y lo segundo es que (los sistemas) tienen un componente de subsidios por parte de sus autoridades. En el Plan de Desarrollo (del Gobierno Duque) queremos dar unos lineamientos y alternativas para que las regiones tengan de dónde obtener los recursos y el reto es que funcionen bien, y ante todo que haya calidad en el servicio.

Todos perdemos si simplemente los concesionarios se quiebran. Este no es un tema de concesionarios sino de movilidad urbana, y parte del problema ha sido la falta de decisiones para acompañar la eficiencia en la operación de estos sistemas, y de apoyar a los entes gestores para lograr sus sostenibilidad.

¿Esos lineamientos de financiación pasan por la creación de más sobretasas, impuestos y otros componentes para aliviar la crisis de esos sistemas?

Todas esas son alternativas que algunas autoridades locales han utilizado como el caso de la sobretasa a la gasolina, las contribuciones por valorización y uso del espacio público, o de fijar impuestos de rodamiento costosos para los vehículos más antiguos.

Hay que alinear, asimismo, unos incentivos para tener un sistema que involucre el concepto de transición energética por el tema de salud de las personas y eficiencia frente al cambio climático. Y que habrá que subsidiar un componente de la operación de estos sistemas de transporte masivo.

En Cali la gente se queja que el MÍO no llega a toda la ciudad, incluso se han planteado rutas alimentadoras del sistema a base de camperos y otros vehículos. ¿Cree que podría ser una solución?

Ese es el reto. El desafío es que debemos tener unas pautas generales y que esa última milla de los sistemas de transporte masivo tendrá que atender unas realidades regionales y locales. Lo que sí sé es que se deben entender las diferencias que tiene cada sistema en su operación y cobertura.

¿Cómo enfrentar el mototaxismo que se ha convertido en un transporte paralelo precisamente por las fallas en el sistema público?

Eso no se va a legalizar como transporte público. En casi ningún país del mundo existe como vehículo homologado, ya que es inseguro y donde las probabilidades de sufrir un accidente son muy altas, y así lo han demostrado las estadísticas en Colombia y en el mundo.

¿Qué va a pasar con las obras de la doble calzada a Buenaventura, que llevan un atraso considerable?

Primero, gestionando en los próximos meses la liberación del corredor del contrato de iniciativa privada Buga-Buenaventura, el cual resultó inviable económicamente por efecto del Laudo Arbitral que declaró la Nulidad del Adicional No. 13 del contrato 005 de 1999 (Malla Vial del Valle del Cauca). Dentro de este proceso se obtendrán los diseños definitivos de la mayoría de las obras que se requieren en el corredor.

Segundo, con el corredor liberado, la ANI adelantará el proceso de estructuración de los proyectos de una nueva concesión que incluyan las obras pendientes en los corredores Buga–Loboguerrero y Loboguerrero–Buenaventura, para la consolidación de la segunda calzada con los estándares que requiere ese corredor tan estratégico para el país.

¿Cree que durante la administración Duque por fin se entregará esa vía tras 10 años de ejecución?

Este Gobierno es consciente de la importancia estratégica de este corredor está comprometido con lograr la contratación de las obras en el 2019 y haber gestionado avances importantes en la ejecución de las mismas para el 2023.

¿Qué tan prioritario es para su cartera el proyecto de la conexión vial hacia la Orinoquía, pues el DNP considera que por ahora no se incluirá en el Plan de Desarrollo de los próximos 4 años?

No es que no sea una prioridad, pero es una obra de tan largo plazo que el reto inicial es dejar estructurados unos estudios bien serios en sus distintas fases. Es una obra de gran importancia para el país.

Más de 300 empresas de carga se declararon en insolvencia en los dos últimos. ¿Ministra, qué está pasando porque eso no es normal en esa actividad?

Es una preocupación enorme para el sector. De hecho, necesitamos un sector de transporte más fuerte y por ello estamos haciendo un cambio estructural en la Superintendencia de Puertos y Transporte por instrucciones del presidente Duque.

Creemos que esa superintendencia tiene que ser líder en el sector para fortalecerlo y por eso venimos revisando todo lo que sucede alrededor de esa actividad.

En ese sentido venimos diseñando una nueva propuesta para la renovación y reposición del parque automotor (de carga) con incentivos adecuados y créditos blandos de largo plazo. Esperamos tener en este último trimestre diseñado un plan en ese sentido para implementarlo el año próximo.

¿Eso significa una reforma a fondo de esa superintendencia?

Queremos tener una regulación seria y una vigilancia adecuada que se enfoque en la calidad del servicio, y también en promover capacitación, tecnologías de información y profesionalización del sector.

Hay que reconocer que ha habido una desatención a los problemas del sector y un incremento en los costos. Y unido a eso una caída en nuestras exportaciones, que por fortuna se están recuperando.

Pero desde el punto de política pública necesitamos —bajo los principios de legalidad y de emprendimiento— tener un sector fuerte, pero luchando contra la ilegalidad que es otro flagelo.

¿La superintendencia ha sido un organismo débil?

La superintendencia la tenemos que cambiar estructuralmente porque está muy atrasada y no tiene dientes ni un foco estratégico hacia dónde vigilar. Es decir, vigilaba solo a los transportadores y a nadie más. Hay suficiente legislación en Colombia, y muchas cosas que la superintendencia no ha hecho. Hay que reformarla; esa es la realidad.

¿En qué está la concesión del aeropuerto Bonilla Aragón y su renovación para el 2019?

Es una iniciativa privada que está ahora a estudio de la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI. Hay unas solicitudes regionales, y hemos pedido que nos presenten los estudios. Y la instrucción que hemos dado por el señor presidente a la ANI es que se debe solicitar la inclusión del aeropuerto de Buenaventura y estamos en ese proceso.

Frente a los problemas con comunidades en la zona (del aeropuerto), la gobernadora, Dlian Francisca Toro nos ha ofrecido su apoyo para trabajar en lo que respecta a ese tema.

“No quiero que este ministerio sea visto como un ministerio de infraestructura, sino como el de la logística y la conectividad. Es importante la regulación del transporte y facilitación de trámites, todo en favor del usuario”.