Elecciones 2026: Thomas Greg & Sons, a un paso de quedarse con billonario contrato

Todo indica que Thomas Greg & Sons, una de las empresas más influyentes en la operación electoral de Colombia, volverá a quedarse con un millonario contrato. Esta vez, para adelantar la logística de las elecciones parlamentarias y presidenciales del 2026, en un proceso que ya ha generado tensiones políticas en la Casa de Nariño.

De acuerdo con información confirmada por Semana, el próximo miércoles 9 de julio, el registrador nacional Hernán Penagos anunciaría oficialmente la adjudicación del contrato a esta firma, que ha venido prestando estos servicios en procesos recientes, incluido el que llevó a la presidencia a Gustavo Petro en 2022.

El contrato más grande en juego

La licitación, valorada en 2,1 billones de pesos, es una de las más importantes en materia electoral para el país. Comprende la etapa preelectoral, la inscripción de ciudadanos, candidatos, jurados, movimientos sociales, y la organización de toda la infraestructura logística y tecnológica del proceso.

Aunque diez empresas manifestaron interés en la convocatoria, finalmente Thomas Greg & Sons fue la que cumplió con los requisitos técnicos y demostró mayor experiencia, lo que la perfila como la adjudicataria definitiva.

Esta posible adjudicación, al parecer, ha puesto en alerta al gobierno Petro, que ha sido un crítico abierto de esta empresa, al punto de intentar frenar su participación en varios contratos públicos.

Un historial de tensiones con el Gobierno

El presidente Gustavo Petro ha señalado en repetidas ocasiones que Thomas Greg & Sons ha sido beneficiada de manera irregular con los contratos más abultados del Estado.

Uno de los más notorios es el de la expedición de pasaportes, actualmente en manos de esta compañía, pero que terminará en agosto de 2025, en medio de los intentos del mandatario por transferir esa función a una entidad portuguesa.

Esa disputa fue uno de los detonantes de la salida de Laura Sarabia del Ministerio de Relaciones Exteriores.

La entonces canciller intentó extender por once meses más el contrato con Thomas Greg, pero fue desautorizada públicamente por Petro, quien no ocultó su inconformidad con la decisión.

Ahora, con la proximidad de las elecciones de 2026, Petro ha vuelto a expresar su preocupación. El 2 de julio, desde su cuenta de X, cuestionó las garantías del proceso:

“¿Qué garantía podemos tener en las próximas elecciones, si el exregistrador, el registrador y el Consejo Electoral han actuado contra nuestros derechos?”, señaló.

La oposición responde

Desde sectores opositores han advertido que el rechazo de Petro a la participación de Thomas Greg & Sons en los comicios podría tener otro trasfondo.

La precandidata presidencial Vicky Dávila fue enfática en señalar que la verdadera intención del presidente, a su juicio, sería poner en duda la neutralidad del proceso y tomar el control sobre la organización de las elecciones.

“La obsesión de Petro con Thomas Greg no es por los pasaportes. Es por las elecciones del 26, donde el papel de esta empresa es crucial. Ese es su verdadero objetivo: sacarla y ponerla en entredicho para poder ‘manejar’ la contienda y los resultados”, aseguró Dávila.

Hay que decir que la empresa no es ajena a la Registraduría. De hecho, recientemente ganó otro contrato por 40.000 millones de pesos para organizar la logística de las elecciones de Juntas Administradoras Locales (JAL) y de áreas metropolitanas, previstas para el segundo semestre de 2025.

Este proceso también generó fricciones entre el registrador Penagos y el secretario de Transparencia de la Presidencia, Andrés Idárraga, quien cuestionó la adjudicación. Incluso, dicha disputa fue escalada a instancias judiciales.