Protección para Caloto

El municipio de Caloto, en el norte del Cauca, es el epicentro de hechos violentos que atentan contra su población.

Sucedió el jueves en la noche cuando una moto cargada de explosivos fue denotada en el puente que lo comunica con Santander de Quilichao, atentado que provocó heridas a siete personas, una de ellas en estado grave, y causó daños en 40 viviendas.

Según el Secretario de Gobierno del Cauca, es el quinto atentado terrorista en lo que va del 2021, causando zozobra y sembrando destrucción.

Según la información preliminar, el ataque terrorista del jueves lo habría cometido una columna de las disidencias de las Farc, conocida por su crueldad y el terrorismo que practica.

Con ello se confirma que lo sucedido en Caloto es parte de la guerra desatada por el narcotráfico que se ha tomado al Cauca.

Si bien hay que reconocer el empeño de la Fuerza Pública y de las autoridades para erradicar ese negocio ilícito, el esfuerzo para proteger a Caloto y a sus habitantes se debe redoblar.

El Estado colombiano no puede permitir que un municipio tan importante para la región sea objetivo frecuente de las organizaciones criminales.

Y ante todo, que sus habitantes sean las víctimas de una violencia que no parece tener final .