La caída de Assange
En el año 2006 el mundo conoció a Julian Assange, el fundador de un portal en internet que divulgaba información clasificada de varios gobiernos.
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11 de abr de 2019, 11:55 p. m.
Actualizado el 17 de abr de 2023, 05:08 p. m.
En el año 2006 el mundo conoció a Julian Assange, el fundador de un portal en internet que divulgaba información clasificada de varios gobiernos.
Pronto se supo que Wikileaks era una organización dedicada al espionaje y hackeo internacional, que había infiltrado embajadas, altas instancias estatales e incluso al ejército más poderoso del planeta para descubrir sus secretos y contarlos, sin importar las consecuencias.
Cuando los países afectados decidieron tomar acciones legales y se pedía la deportación de Assange a Suecia donde era acusado de violación, al australiano se le apareció un salvador: Rafael Correa, entonces presidente de Ecuador.
Correa no solo le dio asilo en la Embajada en Londres; en un hecho absurdo le otorgó la ciudadanía de Ecuador, país que Assange ni siquiera sabía ubicar en el mapa.
Durante 7 años permaneció en la sede diplomática, desde donde siguió usando a Wikileaks para espiar y se alió con Rusia para infiltrar la campaña presidencial de Estados Unidos con intención de favorecer a Donald Trump y afectar al Partido Demócrata.
Ayer, en un acto de responsabilidad, el presidente ecuatoriano Lenín Moreno dejó sin efecto el asilo y le retiró la ciudadanía al fundador de Wikileaks.
Assange fue detenido, y será Gran Bretaña la que decida si lo envía a Suecia para que responda las acusaciones de violación, lo manda a Estados Unidos para que lo haga por espionaje o lo juzga por haberse evadido de su justicia durante tantos años.
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