El problema de los patios
El problema de la congestión en los patios del tránsito está desbordado y necesita de soluciones efectivas; basta aplicar las normas para que el municipio deje de perder recursos y se desgaste por ese concepto.
Miles de motos y carros inmovilizados están abandonados en los patios de tránsito de Cali, sin que se generen las soluciones que requiere el que se ha convertido en un problema grave para la ciudad.
Si bien ya se cerró el Patio de la 66, donde reposaban 9919 vehículos de los cuales 9319 tenían más de un año ahí, y por el cual se había generado una discusión legal con los arrendatarios, lo que se hizo fue trasladar el enredo a otros lugares.
Ahora los patios oficiales de Cali, Acopi y Cencar aglomeran 13.600 vehículos inmovilizados y, aunque la mayoría podrían ser vendidos o desintegrados, el Municipio no ha utilizado la ley que lo habilita para tomar esas decisiones.
Peor aún es que mientras el valor que se paga por kilo de chatarra en el país es de $900, en Cali apenas llega a $85, el mismo que se mantiene desde el año 2017 y que no genera rentabilidad para el municipio.
Por ello ni se chatarrizan ni se venden los vehículos abandonados en los patios, solo se acumulan, generando altos costos de mantenimiento e incumplimiento a los operadores, como sucedió en el lote de La 66.
El problema de la congestión en los patios del tránsito está desbordado y necesita de soluciones efectivas; basta aplicar las normas para que el municipio deje de perder recursos y se desgaste por ese concepto.