Contra la libertad de opinar

Los medios de comunicación son espacios para informar y para publicar lo que piensan los ciudadanos sobre los hechos que consideran relevantes.

Ello sucede cuando se está en una campaña política, como la que se desarrolla en Colombia para definir su próximo presidente de la República, por lo cual se produce el debate, y la opinión pública sobre los candidatos en contienda se expresa de forma libre.

Ese es un principio que se respeta en Colombia como esencia de la libertad, y que en el caso de los medios de comunicación se manifiesta con la libertad de información, de expresión y de opinión.

Por ello se equivoca el candidato Gustavo Petro al calificar a Noticias RCN y a su columnista David Ghitis como neonazis por expresar sus críticas y opiniones sobre las aspiraciones del líder del Pacto Histórico.

Lo que ha manifestado el señor Petro a través de las redes sociales es una forma de radicalizar el debate con calificaciones desproporcionadas y mentirosas, motivadas en la intención de descalificar y satanizar la libertad de opinión.

En cualquier campaña política de una democracia la esencia es el respeto por la opinión ajena.

Por ello usar términos denigrantes, como lo hizo el candidato Petro, es una manera inaceptable de sembrar el odio mediante el ataque a la prensa libre y a la opinión que no le favorece.