Cien años de Vanguardia
En este siglo el diario de Bucaramanga ha sido vocero de una sociedad que ha enfrentado el contraste entre su deseo de construir un futuro y un progreso evidentes, y la intolerancia que despierta la fidelidad a la verdad y a las ideas.
Llegar a los cien años y seguir adelante con éxito es una proeza para cualquier periódico en el mundo.
Y lo es aún más en Colombia, donde defender la verdad e informar con responsabilidad es un deber en medio de los múltiples conflictos que han surgido por toda clase de razones.
El diario Vanguardia lo ha conseguido, manteniendo la irrestricta defensa de principios como la independencia, salvaguardando la democracia y manteniendo su enfoque en lo regional, tal como se comprometió a hacerlo su fundador don Alejandro Galvis Galvis.
En este siglo el diario de Bucaramanga ha sido vocero de una sociedad que ha enfrentado el contraste entre su deseo de construir un futuro y un progreso evidentes, y la intolerancia que despierta la fidelidad a la verdad y a las ideas.
Tampoco se salvó del embate del narcotráfico, como la bomba detonada por órdenes de carteles de la droga en octubre de 1989, la cual destruyó sus instalaciones.
Con la misma valentía que el periódico le ha hecho frente a hechos lamentables, también ha sabido avanzar en el tiempo, se ha modernizado y ha realizado los cambios que demandan los avances tecnológicos y de comunicaciones.
Y seguirá haciéndolo a futuro, de la mano de las nuevas generaciones que lo dirigen y sin perder de vista los principios con los que fue creado y ha respetado desde su fundación el 1 de septiembre de 1919.
El País reconoce y felicita a sus colegas de Vanguardia en su siglo de fecunda existencia.