A las carreras

Por fuera de la Unión Europea y con la incertidumbre de lo que pasará a partir de ahora, así comenzó este 2021 el Reino Unido luego de la firma, casi en el último minuto, del acuerdo postbrexit que marcó su salida definitiva del bloque comunitario al que perteneció durante 47 años.

Nadie quedó satisfecho, pero los británicos coinciden en que lo firmado es lo menos peor entre todos los males posibles.

Al final se lograron consensos en asuntos como un régimen aduanero flexible sin aranceles ni cuotas entre las partes, el compromiso de respetar la igualdad de condiciones laborales y un acuerdo especial para la relación entre España y Gibraltar.

La incertidumbre es qué le espera ahora a Gran Bretaña y si no se le devolverá en su contra una decisión que más que a una necesidad real, corresponde a un interés político del primer ministro Boris Johnson, quien empezó su gobierno con una buena imagen y terminará en caída por el Brexit que cerró a la carrera.

Los acuerdos siempre son factibles de ser arreglados en el camino, pero lo que se prevé es que ese rompimiento se traducirá en el corto plazo en un deterioro de la economía británica y de sus relaciones con la Unión Europea, con consecuencias que podrían ser aún más graves debido a la pandemia que tan fuerte ha golpeado a los ingleses.