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Por un buen periodismo

El periodismo hoy tiene el enorme reto de reflejar esa parte de la sociedad que ignoró, relegó o estereotipó por décadas; reflejarla en todos sus matices, incluso en condición de expertas y no solo como víctimas.

12 de septiembre de 2018 Por: Paola Andrea Gómez Perafán

No son pocos los esfuerzos que se vienen tejiendo desde distintas orillas para entender que el mundo está asumiendo sus nuevos roles y realidades; que las mujeres salieron de lo privado a conquistar lo público y que dejaron de ser protagonistas pasivas de una historia que las relegó, las discriminó y hasta las invisibilizó; que el género, a diferencia del sexo, es una construcción social, y que por ende hay una amplia diversidad que merece ser escuchada y no señalada con morbo. Eso, además de que las distintas formas de acoso, abuso y violencia que aún persisten en nuestra sociedad, cimentadas en el machismo y la homofobia, deben ser contadas sin el sensacionalismo que termina justificando desde lo pasional o desde el ‘se lo buscó’, delitos como el feminicidio.

Por estas y muchas otras razones, el periodismo hoy tiene el enorme reto de reflejar esa parte de la sociedad que ignoró, relegó o estereotipó por décadas; reflejarla en todos sus matices, incluso en condición de expertas y no solo como víctimas. Y si ha de ser el caso, retratarlas con dignidad.

Increíblemente, en pleno Siglo XXI, el Proyecto de Monitoreo Global de Medios 2015 mostró cómo solo el 24 % de las noticias a nivel mundial tienen mujeres como protagonistas, como si no fueran la mitad de la población. Así las cosas, ni pensar en lo poco que hablamos de otras expresiones de género distintas a los hombres y las mujeres. No se trata de ventajismos, de ser unas más que otros. Es una mera cuestión de equidad, de humanidad.

En ese universo, donde cada vez es más necesario ponerse las gafas violeta (metáfora que se usa para explicar que hay que ver el mundo con conciencia de género) surge una valiosa herramienta: ‘Pistas para narrar historias con enfoque de género’, cartilla virtual que presentan Consejo de Redacción, CDR, la Embajada de Suecia, la OIM y la Universidad Javeriana. Un texto que brinda luces a las redacciones, tan presurosas y agitadas, pero cada vez más conscientes de su responsabilidad, en un mundo ligero que urge de relatos contados con rigor.

Fabiola Calvo, periodista y doctora en Ciencias Políticas y Sociología y coordinadora de la Red de Periodismo con Visión de Género, junto a Victoria Aleán, gestora de formación de CDR e integrante de la Red de Periodismo de Género hicieron este juicioso trabajo que explica cómo hacer el cubrimiento de un feminicidio; cómo hacer el de un trabajo sexual, cómo hablar de mujeres lesbianas en la web, cuál es legislación de género, y pautas para garantizar los derechos en el cubrimiento de la paz, entre otros.

Para cerrar esta invitación a la reflexión cito un aparte del editorial de la cartilla, escrito por la presidenta de CDR, Dora Montero, quien enfatiza que no se trata de hacer nada distinto a un buen periodismo: “Reportear, investigar y reportar sobre género implica instalar el tema en la agenda de manera transversal, tratar el tema con respeto y conocimiento, respetar las diferencias y reconocer los errores sin miramientos y con la claridad absoluta que es un paso a paso que requiere inspiración, compromiso y resistencia”. Un camino que vale la pena recorrer.

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