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Cucas famosas de Cali

Un buen amigo, periodista para más señas, me solicitó que le colaborara dándole los nombres de las cucas más famosas de Cali, habida cuenta -según él- mis profundos conocimientos en el tema.

29 de octubre de 2018 Por: Mario Fernando Prado

La solicitud no me pudo parecer más insólita. Un buen amigo, periodista para más señas, me solicitó que le colaborara dándole los nombres de las cucas más famosas de Cali, habida cuenta -según él- mis profundos conocimientos en el tema.

Accedí ni más faltaba y me puse en la tarea. Las primeras cucas que se me vinieron a la mente fueron la ‘Cuca Otero’, bellísima mujer célebre porque sus amistades le llaman “la cuca que canta” habida cuenta su entonada voz, y la inolvidable Cuca de Francisco que descansa en el seno del señor.

Como estas dos cucas no eran suficientes, inicié un recorrido que me llevó a varios lugares, incluso ‘non sanctos’. A muchos a quienes les preguntaba me decían que si estaba loco metiéndome en esos temas y no faltaron dos encopetadas damas que me tildaron de chismoso y de atrevido.

En ese periplo conocí una gran variedad de cucas: unas negras, otras ‘cafeses’, no pocas blancuzcas y unas modernas carentes de bouquet y al extremo desaliñadas. Incluso recurrí al WhatsApp con una solicitud muy concreta: “estoy en la búsqueda de las cucas más famosas de Cali”.

Me llovieron respuestas de mujeres que se dieron por aludidas y de nuevo el pajarraco fue objeto de vejámenes y acusaciones de enfermo sexual y hasta homofóbico. Me remitieron donde GloriaH, donde la doctora Lucía Náder, donde la sexóloga Ana Cristina Mallarino y me pidieron cita con el doctor Carlos Climent, llamándome depravado, sátiro y peligro para la sociedad.

También me contestaron unas mucharejas que afirmaban que sus cucas eran la delicia de propios y extraños y no faltaron las que me ‘wasapiaron’ fotos alusivas para que yo lo constatara con mis propios ojos.

Fue así como visité algunos sitos y ante la pregunta “Ando buscando las mejores cucas de Cali”, me dijeron que yo estaba confundiendo panes con cucas a lo que respondí que no, que lo que buscaba eran cucas.

Me hablaron de ir donde las Otero pero ellas hacen es macetas, las más bellas de Colombia. De ir donde Las Collazos pero su especialidad son los chorizos. Fui a parar a Palmira donde Las Córdobas pero ya están en el más allá y se llevaron la fórmula y en El Molino, Kuty, Montecarlo, La Fina y las panaderías que han montado los paisas no sabían de lo que les estaba hablando.

En fin, les comento que después de varias vueltas y revueltas logré mi cometido y encontré que las cucas más famosas de Cali son las de las Hermanas Clarisas que despachan al lado de la Iglesia de San Antonio. No tienen igual. Se deshacen en la boca y no empalagan. Saborear esas cucas es deleite de los paladares más exquisitos.

La hermana Ana Lucía, en diálogo con Sirirí expresó que el éxito de sus cucas es que primero ponen a hervir la panela con algo de canela y cuando ya está hecha miel, le agregan la harina, la revuelven, le echan la bendición y las hornean a fuego lento, resultando una galletitas delgadas y deliciosas.

Ya con esta información me comuniqué con mi amigo y me enteré que está hospitalizado, víctima de un rebote bilioso producto de la ingesta de unas cucas rancias que luego del empacho de rigor le dio tremenda infección intestinal.

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