“Más que una empresa, es una misión”

Siento que es cumplir con una misión que se debe afrontar con valor para enfrentar los agentes del mal y así bien manejado, con la objetividad y capacidad de discernimiento...

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20 de ene de 2023, 11:35 p. m.

Actualizado el 18 de may de 2023, 03:04 a. m.

El 14 de enero al encontrarme con esta frase con la cual titulo hoy mi opinión, extraída de la columna de Kiko Lloreda, me revivió un encuentro que en sus últimos momentos de vida tuve con su padre. En ese instante me atreví a comentarle lo que sentía ante una invitación que me hacían para que escribiera en el periódico regional más importante del suroccidente colombiano, que nació en el Valle del Cauca de la mano de la familia Lloreda y se había convertido en un referente regional, cultural y familiar. A la frase citada por Kiko, me añadió: “Dentro de los valores que debemos defender y son una misión nuestra y más para usted, está la fe, no tenga miedo. Hágalo, ahí tiene un espacio más amplio para su misión”.

No solo en la Opinión, franja del periódico, han pasado las diversas opiniones desde la jerarquía, la academia, la pastoral y como lo podría definir con el título de mi columna, todos los temas desde el lente espiritual-religioso, para ayudar al desarrollo integral del hombre y a la construcción de patria, en fraternidad y en paz.

El afán de la familia y que lo expresa Kiko: “Colombia necesita con urgencia medios serios. Las bondades de la era digital han traído consigo liviandad”, eso es lo que no me ha dejado dejar de escribir, cuando me encuentro sin tiempo para hacerlo. Siento que es cumplir con una misión que se debe afrontar con valor para enfrentar los agentes del mal y así bien manejado, con la objetividad y capacidad de discernimiento nos pueda servir para vencer uno de los mayores males de nuestra cultura actual, el relativismo, del cual nuestro papa emérito Benedicto XVI, recientemente fallecido decía: “La dictadura del relativismo, que vive la sociedad actual, destruye el concepto de libertad y dificulta el anuncio del Evangelio”.

El papa emérito decía estas frases en el 2010, ante un consistorio de 150 cardenales y añadía: “En el mandato de Jesús de anunciar el Evangelio está implícita la exigencia de la libertad de hacerlo, pero que después de tantos siglos, aún existe oposición. La relación entre verdad y libertad es esencial, pero hoy se encuentra ante el gran desafío del relativismo, que parece completar el concepto de verdad, pero en realidad amenaza con destruirla, proponiéndose como una verdadera dictadura”.

Al final de su vida, Rodrigo, como Benedicto XVI, frente al relativismo, que produce esa liviandad y nos lleva a la cultura líquida de la que nos habla Bauman, o a la aspiración de retorno a los viejos monasterios de monjes, como sería el volver a las fuentes del cristianismo que futuriza en su entrevista el Cardenal Sarah, para recobrar la esencia espiritual y conectarse con el transcendente, o con el convencimiento del padre Jesuita catalán, Javier Melloni Ribas, que solo enamorándose de Jesús se puede hacer contacto con Dios y con todos los que esperan ese encuentro espiritual transformador de las realidades, así en forma sencilla lo entendía el padre de Kiko. Es más importante la misión por realizar que los frutos económicos de la empresa; por eso pedía salvar este medio de comunicación.

Sacerdote, párroco en María Madre de la Iglesia en Vipasa y Prados del norte, fue director del Centro de Investigaciones de la Arquidiócesis de Cali, profesor de Teología en el Seminario Mayor San José de Panamá, y párroco en Buga y en Cúcuta. Escribe para El País desde 1999

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