Tatiana Schlossberg, nieta del expresidente John F. Kennedy muere a los 35 años; padecía un cáncer

La muerte de Tatiana Schlossberg, periodista ambiental y figura reconocida dentro del legado de la familia Kennedy, fue confirmada este martes por sus familiares, quienes informaron del fallecimiento a través de un comunicado difundido por la Biblioteca y Museo Presidencial John F. Kennedy. Tenía 35 años y había revelado recientemente que enfrentaba un cáncer terminal.

La noticia se conoció semanas después de que Schlossberg publicara un ensayo personal en The New Yorker, donde narró el impacto físico y emocional de un diagnóstico que marcó un giro radical en su vida. En ese texto explicó que padecía una mutación poco común de leucemia mieloide aguda, detectada en mayo de 2024, poco después de dar a luz a su segundo hijo.

En su testimonio, la periodista relató cómo los médicos le advirtieron que la enfermedad tenía un pronóstico limitado. A partir de ese momento, describió el desafío de enfrentar tratamientos agresivos mientras asumía la maternidad reciente y la incertidumbre frente al futuro.

Schlossberg detalló que se sometió a quimioterapia y posteriormente a un trasplante de médula ósea, con donación de una de sus hermanas. Sin embargo, explicó que el cáncer reapareció, confirmando el carácter terminal de la enfermedad. Aun así, escribió sobre su esfuerzo por mantenerse presente en la vida cotidiana de sus hijos.

A lo largo de su carrera, Tatiana Schlossberg se destacó como periodista especializada en medioambiente y ciencia. Colaboró con The New York Times y otros medios de alcance internacional, donde abordó temas relacionados con cambio climático, sostenibilidad y el impacto del consumo humano en el planeta.

En 2019 publicó el libro Inconspicuous Consumption, una obra en la que examinó cómo las decisiones cotidianas influyen en el deterioro ambiental, consolidando su perfil como divulgadora y analista en asuntos climáticos.

En su último ensayo, además de abordar su estado de salud, Schlossberg reafirmó su defensa de la ciencia y la medicina, y cuestionó posturas contrarias a la evidencia científica. En ese contexto, criticó públicamente la visión antivacunas de su primo Robert F. Kennedy Jr., manteniendo coherencia con su trayectoria profesional.

Tatiana Schlossberg era hija de Caroline Kennedy, exembajadora de Estados Unidos en Japón y Australia, y del diseñador y artista Edwin Schlossberg. Formaba parte de una de las familias más influyentes de la historia política estadounidense.

Con su fallecimiento, se suma una nueva pérdida a la saga Kennedy, una familia marcada durante décadas por episodios de tragedias personales que han acompañado su protagonismo público.

A Schlossberg le sobreviven su esposo, George Moran; sus dos hijos, un niño y una niña; así como sus padres y sus hermanos, Rose y Jack Schlossberg, quienes han recibido múltiples muestras de solidaridad tras conocerse la noticia.