El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Mundo

Artículo

¿Se ha convertido el Cáucaso en el nuevo foco del terrorismo mundial?

Las investigaciones por el atentado en Boston se dirigen a Daguestán, considerado el centro de la inestabilidad y la crisis rusa.

5 de mayo de 2013 Por: Patricia Lee | Especial para El País

Las investigaciones por el atentado en Boston se dirigen a Daguestán, considerado el centro de la inestabilidad y la crisis rusa.

Los hermanos Dzhojar y Tamerlán Tsarnaev, que pusieron las bombas en Boston y que habían adoptado el ‘american way of life’ o ‘estilo de vida americano’, no fueron entrenados en un campo de Al Qaeda, no recibieron órdenes, ni tenían una red terrorista detrás. Pero en sus mochilas cargaban el explosivo resentimiento de siglos de persecuciones e injusticias contra los pueblos del Cáucaso.Como dice el analista ruso Konstantin Kazenin, “el pasado de los Tsarnaev y su familia tiene más importancia que cómo, cuándo y por qué fueron afectados por ideas radicales”, porque representan “un ejemplo de una familia del Cáucaso de fines de la época soviética que ha debido sobrevivir sin apoyo social en medio de nuevos espacios poco amigables”.La historia de un puebloEn la corta biografía de los hermanos Tsarnaev se pueden leer los trazos de la historia de su pueblo. Su familia vivía en Kirguistán, una república asiática que perteneció a la Unión Soviética, ubicada en Asia Central, donde el pueblo checheno fue deportado masivamente en 1944 por orden de Stalin, que acusó a etnias enteras de tener simpatías con el nazismo.Después de la muerte del dictador, Nikita Jrushev rehabilitó a estos pueblos y les permitió volver, pero no todos lo hicieron, porque en el ínterin, nuevos habitantes ocuparon sus lugares. Como muchas otras, la familia Tsarnaev no volvió a Chechenia sino a Daguestán, la república vecina, de donde viajó a Estados Unidos, continuando una vida en el exilio.Los pueblos del Cáucaso norte fueron conquistados a sangre y fuego por los zares en el siglo XIX. Después de la revolución rusa de 1917, conocieron un periodo de libertad y conformaron una república independiente en el marco de la Unión Soviética, pero rápidamente fueron anexados a Rusia. Tras la disolución de la URSS en 1992, vieron la oportunidad de luchar nuevamente por su autonomía y Chechenia proclamó su independencia.En 1994, el presidente ruso Boris Yeltsin envió a su ejército, el segundo más grande del mundo, para reprimir al pueblo rebelde, sufriendo una desastrosa derrota que le permitió al pequeño país conseguir su autonomía. En 1999, tras una serie de atentados terroristas, el entonces primer ministro Vladimir Putin inició la segunda guerra de Chechenia, eliminando su autonomía y colocando a la república bajo la administración directa de un enviado del Kremlin.Daguestán: el desorden se extiendeChechenia se pacificó a la fuerza, pero miles de chechenos abandonaron el país y fueron a vivir a Daguestán, la república más importante de la región, con tres millones de habitantes y más de treinta nacionalidades distintas. Los combatientes chechenos derrotados se retiraron a las montañas, agrupados en el Emirato del Cáucaso, conducidos por Doku Umarov, y desde entonces el descontento islámico se fue expandiendo por toda la región al tiempo que las tradiciones islámicas moderadas de la época soviética fueron dando lugar a un islamismo más radical.Daguestán se fue convirtiendo en el centro de la inestabilidad y la crisis. Este año ocupa el primer lugar en víctimas de violencia política de todo el Cáucaso: según el observatorio ‘Kavkazki Uzel’, ya van 67 muertos y 41 heridos sobre un total de 200 víctimas. Ante esta situación, el gobierno ruso destituyó en enero al presidente de la república y lo reemplazó por Ramazán Abdulatipov. Además, decidió no permitir en Daguestán elecciones directas a gobernador.Para Aleksandr Skakov, del Instituto del Este de la Academia de Ciencias Rusa, el problema en Daguestán “es que no funcionan los ascensores sociales. Es difícil conseguir trabajo, se van a buscarlo en otra región de Rusia”. Se produce entonces la “arcaización de la sociedad: cuando la parte más activa y móvil de la población se va a Moscú y San Petersburgo, su puesto lo ocupan campesinos, que no encuentran lugar en una sociedad de clanes y jerarquizada. Por eso se agudiza el problema del radicalismo islámico: los que no se pueden ir a otros lugares de Rusia o al exterior, se van a combatir a las montañas”, agrega.Para Oleg Orlov, presidente de la ONG Memorial, Daguestán es la región más inestable en el Cáucaso Norte, con organizaciones terroristas que buscan imponer el islam, y con un estado que responde con el terror: secuestros, torturas, cárceles secretas, juicios falsificados, asesinatos.“Esto sucede en el marco de un fracaso del estado laico de nuestro país, en la economía, en la esfera social, la educación, la salud y la lucha contra la corrupción, pero en Daguestán los vicios del sistema se expresan de manera más clara”, dice. Lo grave, según Orlov, es que en Daguestán existe una alternativa, la justicia islámica, que se fortalece ante las injusticias cometidas por los gobernantes.“El estado, con su actuar ilegal, amplia la base de apoyo de la subversión armada”, concluye.Fronteras calientes Además de Daguestán, todo el Cáucaso es una zona de inestabilidad, donde las fronteras, trazadas y modificadas arbitrariamente ante cada giro político, son un nuevo factor de crisis. En abril, fuerzas chechenas ingresaron a un distrito de la vecina Ingusetia, reclamando la soberanía sobre él.Para Ekaterina Sokirianskaya, experta en el Cáucaso, “las pretensiones de Chechenia sobre Ingusetia se pueden convertir en un conflicto político de gran escala, porque la mayoría de los grupos étnicos que viven en el Cáucaso tienen pretensiones territoriales con los vecinos, ya que las actuales fronteras administrativas fueron trazadas arbitrariamente y cambiaron varias veces. El mapa administrativo del Cáucaso norte es el resultado de la conquista colonial y de las particularidades de la administración zarista primero y soviética después. Las fronteras fueron modificadas después de la deportación estalinista y cuando volvieron los pueblos reprimidos del exilio y modificarlas puede llevar al enfrentamiento de pueblos enteros, agrega Sokirianskaya.

AHORA EN Mundo