Rubíes, zafiros y diamantes: los planetas donde llueven piedras preciosas

La lluvia, como la conocemos, es un fenómeno atmosférico por el que el vapor del agua se condensa y cae al suelo en forma de gotas. Sin embargo, a diferencia de la Tierra, en otros planetas no se ha descubierto agua líquida en la superficie, por lo que las precipitaciones son asombrosamente diferentes.

Por ejemplo, en planetas como Urano y Neptuno, las precipitaciones serían de diamantes. En un pódcast de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, más conocida como Nasa, la astrofísica Naomi Rowe-Gurney explicó que en estos lugares hay metano, un gas natural compuesto por carbono e hidrógeno que da el color azul a estos planetas y que es “aplastado” por la alta presión.

“Cuando hace mucho calor y la atmósfera es muy densa, la presión y las altas temperaturas forman diamantes que se acumulan, se vuelven aún más pesados y llueven”, señaló la científica.

Urano y Neptuno no son los únicos, pues según un estudio de la Universidad de Yale, un planeta llamado 55 Cancri E tiene un manto, aparentemente, compuesto por diamantes, debido a las altas temperaturas y presiones que comprimen el carbono y lo transforman en diamantes.

No obstante, no en todos los planetas llueven piedras preciosas. En el caso de Venus, las precipitaciones son de un compuesto extremadamente corrosivo: el ácido sulfúrico. Esto se debe a que la atmósfera del planeta está llena de nubes, que lo mantienen a una temperatura de aproximadamente 480º centígrados.

La lluvia solo se acerca a 25 kilómetros de la superficie antes de convertirse en gas, un fenómeno por el que los científicos determinaron que la atmósfera de Venus podría tener una gran carga eléctrica. La aparición de estos rayos en Venus, al igual que en otros planetas, es un descubrimiento importante porque las descargas eléctricas pueden contribuir a los cambios químicos de una atmósfera planetaria.

“Además de toda la presión y el calor, podemos confirmar que hay relámpagos en Venus, tal vez incluso haya más actividad de la que hay aquí en la Tierra”, detalló Christopher Russell, responsable de la misión Dawn de la Nasa.

Descubierto en 2020, el planeta LTT9779b, del tamaño de Neptuno, es definido por los científicos como un mundo en llamas donde llueven gotas de titanio. Este exoplaneta es el más brillante detectado hasta ahora fuera del Sistema Solar.

Los investigadores “consideraron la formación de estas nubes de la misma manera que se produce la condensación en un baño después de una ducha caliente”, destacó Vivien Parmentier, investigador del Observatorio de la Costa Azul y coautor de un estudio publicado en la revista Astronomy and Astrophysics.

En Titán, por otro lado, hay tormentas heladas de metano, uno de los gases más citados en el cambio climático y cuya procedencia principal son las flatulencias del ganado vacuno. Así como la Tierra tiene un ciclo de agua, la luna más grande de Saturno tiene un ciclo de metano: que inicia en su forma líquida por sus bajas temperaturas (-179 °C) y forma lagos de metano que, luego de su evaporación, se convierten en nubes y se descargan en forma de lluvia.

“Según nuestro modelo, la liberación de metano está inducida por anomalías térmicas dentro de la corteza helada, que se generan por cristalización en el océano interno. Partes de la corteza podrían calentarse de vez en cuando por la actividad criovolcánica de Titán, lo que hace que libere su metano a la atmósfera”, expuso Gabriel Tobie, científico planetario de la Universidad de Nantes, en declaraciones a la Agencia Espacial Europea (ESA).

A 63 años luz de distancia se encuentra HD 189733b, un planeta conocido como el Júpiter Caliente por su alta temperatura superficial y su cercanía con su estrella. En 2008, un equipo liderado por el astrofísico de la Universidad de Exeter, Frederic Pont, descubrió que el planeta es azul, no por la presencia de agua, sino de vidrio. Los científicos encontraron que la atmósfera turbulenta de este planeta se compone de partículas de silicato, el principal ingrediente del vidrio.