Estados Unidos elimina programas de reunificación familiar para ciudadanos de Colombia y otros seis países latinoamericanos

La Administración de Donald Trump ha puesto fin en Estados Unidos a los programas migratorios de reunificación familiar (’Family Reunification Parole’) del cual se beneficiaban ciudadanos de Colombia y de otros seis países latinoamericanos como Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití y Honduras.

El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) argumentó que la decisión se tomó porque se estaban presentando supuestos abusos en estas protecciones para que las familias pudieran obtener el permiso de permanencia de manera temporal por razones humanitarias.

"Esta administración está poniendo fin al abuso de la libertad condicional humanitaria, que permitía a extranjeros con una investigación deficiente eludir el proceso tradicional de libertad condicional", afirma el comunicado de la cartera estadounidense.

Por lo tanto, los migrantes que hasta hoy siguen con estos programas y se encuentran residiendo en el país norteamericano, tendrán un plazo hasta el próximo 14 de enero del 2026 para conseguir un estatus legal de residencia en territorio estadounidense presentada antes del 15 de diciembre. Esto exenta a aquellos que tengan una solicitud de residencia permanente.

“Los extranjeros que no tengan una base legal para permanecer en los Estados Unidos tras la finalización de su permiso de residencia deben abandonar el país antes de la fecha de finalización de dicho permiso”, advierte la Casa Blanca.

De lo contrario, en caso de no lograr el estatus letal, deberán abandonar Estados Unidos y dirigirse hacia su país natal hasta mediados de enero. Para hacer ese proceso, cada migrante podrá usar la aplicación CBP Home con el fin de reportar su salida de territorio estadounidense.

Otras de las novedades con la terminación de este programa es que el DHS dará por finalizado la autorización de empleo asociada y los afectados serán notificados de manera individual.

El Gobierno Federal destaca la posibilidad de ofrecer incentivos de regreso hacia aquellos migrantes que considere que califican. Estos son: asistencia financiera, ayuda con documentos de viaje y destitución de multas civiles.

“Los programas FRP presentaban deficiencias de seguridad causadas por una investigación insuficiente, que actores maliciosos y fraudulentos podían aprovechar para ingresar a Estados Unidos, lo que representaba un nivel de riesgo inaceptable para el país”, detalla el DHS.

Para el Gobierno Trump, todos estos programas fueron usados indebidamente por los migrantes porque permitía que personas poco verificadas ignoraran el proceso tradicional que se ha llevado a cabo para la obtención de esta protección migratoria.

“El deseo de reunificar a las familias no invalida la responsabilidad del gobierno de prevenir el fraude y el abuso, ni de garantizar la seguridad nacional y pública”, aseguró en su momento el Departamento de Estado.