El Partido Verde dejó en libertad a votantes

En la segunda vuelta presidencial brasileña, el voto de Marina Silva será “secreto”.

El Partido Verde, PV, de Brasil, liderado por la senadora y ex candidata presidencial Marina Silva, anunció ayer oficialmente su “independencia” para la segunda vuelta electoral del próximo 31 de octubre, que enfrentará a la oficialista Dilma Rousseff y al opositor José Serra.De los 80 delegados votantes del PV, 65 del Partido y 15 de la sociedad civil, 76 se mostraron a favor de la independencia y cuatro expresaron su voto a favor de Rousseff y de Serra, anunció en Sao Paulo el presidente del Partido Verde y diputado electo, José Luiz Penna.El dirigente político detalló que los militantes del PV tendrán “plena libertad” para expresarse a favor de alguno de los candidatos, incluso pudiendo participar de propagandas y actos públicos, pero siempre a título personal y no a nombre del PV.El gobernante Partido de los Trabajadores, PT, y el opositor Partido de la Social Democracia Brasileña, Psdb, aguardaban con ansiedad la decisión del PV, que se convirtió en la tercera fuerza electoral del país, después de la primera vuelta del pasado 3 de octubre.Rousseff, con el 46,9% de los votos, lideró la primera vuelta, seguida por Serra, que alcanzó el 32,6%, y de Silva, quien sorprendió con el 19,6% del apoyo electoral.“El hecho de no haber optado por un alineamiento en este momento no significa neutralidad en cuanto al rumbo de estas elecciones”, señaló Silva en una rueda de prensa, en la que manifestó que su voto será “secreto”.Para Silva, “la agresividad de la disputa por el poder (entre PT y Psdb), la dualidad destructiva, sofoca la construcción de una política de paz” y criticó el uso de la religión como “arma electoral” por parte de los candidatos.Millonario escándaloEntre tanto, el banco público alemán Kreditanstalt fur Wiederaufbau, KfW, acusó al presidente de una subsidiaria de la estatal brasileña Eletrobras y asesor de la candidata Dilma Rousseff, Valter Luiz Cardeal de Souza, de apadrinar un fraude en créditos internacionales, de unos 157 millones de euros, informó ayer la prensa.Por su parte, la candidata oficialista Dilma Rousseff, culpó ayer a ese banco público por aceptar el aval ilegal para otorgar las líneas de crédito a empresas brasileñas.Dato claveJosé Serra negó ayer que su esposa, Mónica Allende, se hubiese practicado un aborto y comparó la acusación con una “difamación” similar contra Luiz I. Lula.