Desde hoy, fieles hacen fila para asistir a misa del Papa en la ciudad de Aparecida

Las autoridades esperan que entre 150.000 y 200.000 fieles acudan a Aparecida en coincidencia con la visita de casi siete horas que el Pontífice realizará a la basílica, que tiene capacidad para 30.000 personas y recibe anualmente la visita de once millones.

La visita que el papa Francisco realizará este miércoles a Aparecida prácticamente quintuplicará la población de esta ciudad del estado de Sao Paulo que acoge el mayor santuario latinoamericano, dedicado a la patrona de Brasil.Las autoridades esperan que entre 150.000 y 200.000 fieles acudan a Aparecida en coincidencia con la visita de casi siete horas que el Pontífice realizará a la basílica, que tiene capacidad para 30.000 personas y recibe anualmente la visita de once millones.El número de personas esperadas es cerca de cinco veces la población de 35.000 habitantes contabilizada en el Censo de 2010 en Aparecida.El Papa, que inició el lunes una visita de una semana a Brasil para participar en la Jornada Mundial de la Juventud, solicitó visitar el Santuario Nacional de Nuestra Señora de Aparecida, un complejo de 23.300 metros cuadrados.Francisco estuvo por última vez en Aparecida hace dos años cuando, en su condición de arzobispo de Buenos Aires, fue el redactor del documento final de la Asamblea General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, una reunión a la que acudió el papa Benedicto XVI.Pese al gigantismo del santuario y a su capacidad para 30.000 personas, tan sólo 15.000 podrán ingresar mañana a la basílica para asistir a la misa que Francisco celebrará y a la bendición que impartirá a los fieles."Comenzaremos a distribuir entre los peregrinos 13.000 pulseras a partir de las 5:00 a.m. Cuando se acaben las pulseras bloquearemos la entrada. Los demás tendrán que asistir a la misa en las pantallas gigantes que montamos en los estacionamientos", explicó el rector del Santuario Nacional, el sacerdote Domingos Savio.A estos 13.000 fieles se sumarán 2.000 personas con lugares ya reservados, entre los cuales están 30 miembros de la comitiva del Papa, 42 obispos, 1.100 sacerdotes, 87 diáconos y diferentes autoridades.Quienes no ingresen a la basílica podrán ver al Papa en los dos recorridos que realizará en Papamóvil por las estrechas calles de Aparecida.En el primero irá desde el helipuerto hasta el santuario y en el segundo desde la basílica hasta el Seminario Bom Jesus, en donde almorzará con varios religiosos, bendecirá una imagen de San Frei Galvao, el primer santo nacido en Brasil, y visitará a cerca de 50 monjas de clausura.Aparecida fue tomada hoy por cerca de 4.000 militares y 1.000 policías, que montaron retenes en todos los accesos de la ciudad y tienen previsto cerrar el tránsito de automóviles en todas las calles aledañas a la basílica desde esta noche.Cerca de 150 militares tendrán la misión de requisar a todos los fieles que ingresen por los diferentes portones del santuario, que también tendrán que pasar por detectores de metales.Personal de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) encontró el domingo una bomba de fabricación casera de bajo potencial lesivo en unos de los baños del Santuario y la Policía Militarizada la detonó, según informó el lunes ese cuerpo.Numerosos peregrinos llegaron a la ciudad en los últimos días y están a la expectativa de la misa que el primer papa latinoamericano celebrará en el mayor santuario de toda América.Además de los tradicionales grupos de peregrinos de diferentes ciudades brasileñas que llegan en autobuses fletados, en Aparecida es posible ver jóvenes de diferentes países, especialmente latinoamericanos, que decidieron pasar por el santuario antes de dirigirse a Río de Janeiro para participar en la Jornada Mundial de la Juventud."Estamos en Brasil desde el 18 de julio y, tras un encuentro en Nueva Friburgo, quisimos pasar por Aparecida porque formamos parte de un instituto secular muy devoto de la virgen", dijo la estudiante peruana Yesenia Meza, una de las 160 jóvenes integrantes de la 'Milicia de Santa María' que llegaron para ver al Papa."No podíamos venir a Brasil y dejar de visitar el mayor santuario del país", según el español Kristian Hernández, un integrante de la Congregación de los Dehonianos, que tuvo una reunión internacional en la ciudad de Taubaté antes de dirigirse a Río de Janeiro.El argentino Agustín Ezequiel, un laico también de la Congregación Dehoniana proveniente de la provincia de Córdoba, manifestó su gran expectativa de poder ver al que ahora es considerado como el más ilustre de sus compatriotas.