Condenan ataque de Estados Unidos contra lancha en el Caribe que dejó once muertos

La ONG Amnistía Internacional denunció que el ataque lanzado por Estados Unidos sobre una lancha que supuestamente transportaba drogas en el mar Caribe sienta un peligroso precedente.

Según alerta, la información obtenida por el momento demostraría que existen “serias dudas” en cuanto a la legalidad y el respeto de los Derechos Humanos de quienes iban a bordo de la embarcación, que al parecer sería venezolana.

La organización se mostró “profundamente alarmada” por este suceso, en el que ve “una clara violación del derecho a la vida”. “El uso de la fuerza letal en este contexto no tiene ninguna justificación”, ha subrayado la directora de Amnistía para Estados Unidos, Daphne Eviatar, en un comunicado.

En este sentido, advirtió que el Derecho Internacional establece que el uso de la fuerza letal debe quedar reservado a momentos en los que sea “completamente inevitable para proteger la vida” y no haya ninguna otra opción disponible, de tal manera que siempre sea “proporcionado”.

Eviatar reclamó una investigación “rápida, completa, independiente, imparcial y transparente” sobre el ataque, al tiempo que instó de manera directa al Gobierno de Donald Trump a respetar en todo momento y bajo cualquier circunstancia sus obligaciones internacionales.

Asimismo, Michael Shifter, profesor adjunto de la Universidad de Georgetown, indicó que el despliegue naval de Estados Unidos en el Caribe es un asunto preocupante porque se trató de una acción “ilegal, con poca transparencia” y sobre la que se debe reaccionar.

“Siempre hay riesgo de que esto escale, no se sabe. Según el secretario de Estado, Marco Rubio, se seguirán tomando esas acciones y es muy grave, porque hay maneras de combatir el narcotráfico, pero no destruir un buque en el que no sabemos quiénes estaban”, dijo.

Para él, “es probable que esto profundice la desconfianza sobre la administración Trump y sus planes en América Latina. Esto no ayuda a construir confianza”.

Según el analista, el objetivo de Washington es provocar pánico e infundir miedo, igual como lo ha hecho el gobierno de Nicolás Maduro, pero a la vez advierte que se está enviando mensajes contradictorios hacia Venezuela.

“Muchos se preguntan como conciliar esta acción agresiva contra Caracas con el hecho de que haya concedido licencia a Chevron para sus operaciones en ese territorio y mantenga vuelos a ese destino”, añadió.

Como es conocido, el bombardeo ocurrido el pasado martes se saldó con once muertos y tuvo como objetivo una embarcación que había salido de Venezuela y en la que, según la información oficial de Washington, viajaban miembros del cartel del Tren de Aragua.

El ministro del Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, también acusó a Estados Unidos de cometer asesinatos extrajudiciales, alegando que “ninguna sospecha de narcotráfico autoriza ejecuciones en el mar”.

Sin embargo, el presidente Trump respondió señalando que “Venezuela ha actuado mal. Han estado enviando a millones de personas a nuestro país, muchas de ellas pertenecientes al Tren de Aragua. Algunas de las peores personas del mundo con respecto a las pandillas”.

Además aseguró que Estados Unidos cuenta con grabaciones de esos supuestos narcotraficantes procedentes de Venezuela. “Se pueden ver las bolsas de drogas repartidas por los barcos”, dijo y agregó que muchos de ellos se lo pensarán dos veces antes de llevar a cabo sus actividades delictivas si son conscientes de que serán grabados.

“Han vaciado sus cárceles en Venezuela y los han trasladado a Estados Unidos y ese es parte del problema. Les estamos echando y les estamos echando rápidamente, pero esto ha causado un problema tremendo”, mencionó el mandatario.