¿Qué está pasando en Cali? Más de 100 asesinatos convierten este año en el más violento desde 2022

El incremento en los homicidios en Cali en lo corrido de 2025 preocupa a ciudadanos y autoridades, pues de acuerdo con las cifras del Observatorio de Seguridad, entre el 1 de enero y el 2 de diciembre se registraron 969 asesinatos, 116 más que durante el mismo periodo de 2024, lo que representa un aumento del 14 %.

Según los datos de las autoridades, a corte del 29 de noviembre, 901 víctimas fueron hombres y 59 mujeres. Además, el tipo de arma más utilizada es la de fuego, usada en el 82,28 % de los casos; el arma cortopunzante, que representa el 13,1 % de los hechos, y otros tipos de elementos, que se emplearon en 4,62 %.

Los días más violentos en Cali son los domingos, pues se han registrado 199 asesinatos. Sobre el tema, el secretario de Seguridad de Cali, Jairo García, explicó a El País que este no es un fenómeno nuevo, es una tendencia que se ha registrado en los últimos años.

“El día domingo recibe toda la carga que viene del viernes y el sábado, de la rumba, de la ingesta de licor y de los casos de intolerancia. Por eso la mayoría de los casos se presentan durante las primeras horas o la madrugada del domingo”, afirmó el funcionario.

Además de los domingos, los lunes, con 158, y los sábados, con 141, también tienen altas cifras de asesinatos. “Los fines de semana han sido los más violentos en Cali, pero hay que destacar que en los últimos meses hemos logrado avanzar en reducir el comportamiento”.

Según expertos consultados por El País, Cali es la ciudad más violenta de Colombia en décadas recientes y 2025 se proyecta como un año complejo, pues ha registrado un aumento en las cifras respecto a los tres años anteriores.

De acuerdo con el Observatorio de Seguridad, entre el 1 de enero y el 2 de diciembre de 2024 hubo 853 homicidios; en 2023 se presentaron 934 y en 2022 hubo 888, en contraste con los 969 de este año.

Sobre el tema, el comandante de la Policía de Cali, Henry Bello, indicó a El País que “no es el año más violento”, pues se ha logrado la reducción de más de 12.000 delitos de alto impacto como hurto en diferentes modalidades y extorsión: “En la única conducta delictiva en que hemos tenido un incremento ha sido en los homicidios”.

Por su parte, el Secretario de Seguridad afirmó que “las estadísticas muestran que dos de los cuatro años menos violentos en 33 años en la ciudad se han logrado durante la administración del alcalde Alejandro Eder”.

Según sostuvo García, en 2021, por ejemplo, el número de homicidios en los primeros 11 meses del año fue de 1129.

Para evitar que estos hechos continúen ocurriendo, la Policía está manejando un enfoque preventivo en el que trabaja en conjunto con la Fiscalía, la Alcaldía, las Juntas de Acción Comunal y los gremios.

Diciembre, un mes que preocupa

El que debería ser un mes de felicidad y unión familiar, es en realidad uno de los más violentos del año históricamente en Cali, pues en diciembre las fiestas, la ingesta de licor y otros factores pueden incidir en el número de homicidios.

Sobre el tema Héctor Herrera, asesor en inteligencia y contrainteligencia, indicó que en el último mes del año algunos ciudadanos que tienen problemas con bandas delincuenciales visitan a sus familiares, por lo que los criminales están alerta para atentar contra sus vidas. Además, los hechos de intolerancia pueden aumentar.

Por ello, este cierre de año las autoridades implementarán un plan robusto para avanzar en investigaciones y capturas de los responsables de recientes hechos de homicidios.

“Habrá mayor presencia de la Fuerza Pública en zonas críticas y turísticas. Se realizarán intervenciones integrales con distintas secretarías para asegurar un ambiente navideño tranquilo”, sostuvo García.

Bello agregó: “Hemos hecho unas intervenciones focalizadas de acuerdo con la georreferenciación, megatomas, el plan avispa y entre todos los ciudadanos y la Policía Nacional, trabajaremos de manera conjunta para evitar que se generen casos de intolerancia al interior de las familias”.

Lucha por control territorial

El consultor en seguridad y paz, Felipe Fernández, aseguró que las bandas y estructuras criminales dejaron de ser un fenómeno marginal y hoy delinquen múltiples actores con intereses, métodos y alianzas distintas que compiten por microtráfico, control de rentas ilegales y dominio territorial.

“Ese mosaico criminal fragmentado deshace cualquier idea de ‘orden de pandillas’ y produce una competencia permanente por poder, ingresos y control social”, dijo Fernández.

Según explicó el consultor, en 2025 la disputa territorial ya no está en manos solo de grupos barriales; “ingresan actores más sofisticados, con más recursos, estructuras más estables y portafolios de rentas mucho más amplios. Estos actores imponen miedo, autoridad y normas paralelas, configurando una gobernanza criminal que reemplaza, en varias zonas, la presencia estatal”.

Asimismo, Héctor Herrera, aseguró que, además de las bandas delincuenciales locales, a la capital vallecaucana están llegando grupos ilegales provenientes de otros puntos del país que son contratados para cometer actos de sicariato y luego vuelven a sus ciudades de origen.

“Vienen de otras partes, le hacen el seguimiento a la víctima, la siguen, la ubican y cuando ven la oportunidad cometen el homicidio u otros delitos. Pero en algunos casos se trata de bandas emergentes integradas por personas que no residen en Cali.

Cabe resaltar que algunas de las zonas más violentas son las comunas de oriente y la ladera de la ciudad. De acuerdo con las cifras del Observatorio de Seguridad de Cali, la Comuna 15, con 103 homicidios, es la más afectada ; seguida por la 14, con 87 casos; la 18, con 85; la 21, con 17; y la 13, con 68.

Además, los barrios con más asesinatos en lo corrido del 2025 son Los Comuneros I y Sector Alto Jordán, con 21 hechos cada uno; El Morichal y Mojica, con 20 cada uno; Sector Alto de los Chorros y Sucre, con 19 homicidios; Alto Nápoles, con 18; José Manuel Marroquín I, con 17; El Retiro, El Vergel y Promociones Populares B, con 16; y Potrero Grande, con 15.

Cabe destacar que el Comandante de la Policía de Cali reveló que en lo corrido del año, a través de los operativos realizados por las autoridades se han logrado más de 6500 capturas, “4581 en flagrancia y 1821 por orden judicial. Lo más importante, hemos capturado a 434 homicidas”.

Jóvenes, víctimas de la inestabilidad institucional

María Isabel Gutiérrez indicó que para mejorar la situación todos los sectores deben trabajar articuladamente, tanto el público como el privado, por lo que las políticas de seguridad no deben implementarse solamente durante los cuatro años que dura una administración, sino que las estrategias que funcionen deben ser retomadas por las alcaldías siguientes.

“Nosotros tenemos un ejercicio que puede mostrar evidencias claras de reducción de homicidios en jóvenes y fue TIP-Jóvenes Sin Fronteras, un proyecto integral que se hizo desde la Secretaría de Seguridad y Justicia del gobierno Armitage y que logró bajar en nueve comunas que tienen problemáticas en Cali los homicidios en jóvenes en un 87 %”.

Sin embargo, según la experta, infortunadamente durante la administración del exalcalde Jorge Iván Ospina no se retomó y aunque actualmente la Alcaldía de Cali tiene programas de intervención social para los jóvenes en diferentes comunas de la ciudad, en su concepto “no se ha hecho de manera integral”.

Felipe Fernández concordó, pues “cada administración reinicia su propia política de seguridad (a pesar de que en esta administración finalmente se aprobó la política pública), desmonta lo que había y cambia prioridades, lo que impide construir capacidades consistentes”.

Para él, el resultado es una ciudad sin continuidad estratégica, que no tiene herramientas duraderas y sin fuerza institucional para contener “una violencia que brota de sus propias fracturas territoriales y sociales”.

Cabe resaltar que 440 de los homicidios fueron cometidos contra personas de entre 18 y 30 años, por lo que María Isabel Gutiérrez, directora del Instituto Cisalva, indicó que gran parte de los afectados son jóvenes, quienes “siguen involucrándose en problemas de homicidios y de conflictos. Por un lado pueden ser situaciones de criminalidad que terminan en muertes de estos chicos o problemas en temas de convivencia”.

Sobre el tema el Secretario de Seguridad indicó que en 2025 se han reducido los asesinatos contra jóvenes y mujeres. “En mujeres se han registrado 120 casos, frente a los 146 reportados en la administración anterior. Y en jóvenes los homicidios se redujeron a 850 casos, en comparación con los 1147 ocurridos durante el gobierno anterior”.

Además, se está llevando a cabo el programa Jóvenes en la Buena, en el que se trabaja con personas que viven en entornos vulnerables, apoyándolos con oportunidades académicas, laborales y culturales para alejarlos del entorno de violencia.

Reforzar operatividad

Si bien la Secretaría de Seguridad, la Policía y la Secretaría de Tránsito, entre otras instituciones, han realizado planes de control en las calles de Cali durante todo el año, Héctor Herrera aseguró que deben incrementarse y replantear la eficacia de las estrategias actuales.

“Los policías están pidiendo antecedentes a las personas, pero lo están haciendo al revés, ya que cuando las abordan les piden el número de la cédula, pero si es un delincuente no va a dar su número real, puede dar uno falso o de un familiar. La cédula debe pedirse en físico”, aseguró el asesor en inteligencia y contrainteligencia, quien además es expolicía.

Además, indicó que es vital realizar requisas a las personas en toda la ciudad en los operativos de control, ya que “ no sirve de mucho si sacan 10 policías a un puesto de control si no se están realizando los planes exhaustivos en cada punto, deben precisarse los protocolos y lo más importante, cumplirlos”, manifestó Herrera.

Por su parte, la directora de Cisalva sostuvo que se deben analizar otros factores conjuntamente con los operativos que se realizan desde la Secretaría de Seguridad y Justicia “para saber qué tan efectivos son los programas o la inversión que está haciendo el municipio en el programa alrededor de los homicidios”.

Sobre el tema, el Comandante de la Policía de Cali, Henry Bello, reconoció que se deben realizar actualizaciones. “Tenemos que hacer ajustes, seguir persiguiendo sicarios y a estructuras criminales que están en la ciudad y que generan estos homicidios.

Esto dicen los exsecretarios de Seguridad de Cali

El exsecretario de Seguridad de Cali, Carlos Rojas, investigador independiente de GovLab en políticas comparadas de Latinoamérica, aseguró que: "El país no se ha ocupado de legislar y además de producir políticas para atender los fenómenos de las ciudades.

Por eso estos temas del homicidio, del microtráfico, de la extorsión, de la trata de personas que, además tienen muchos de estos con notación internacional, finalmente, en vez de reducirse tienden a aumentarse, porque el país no se ha ocupado de legislar y de producir normas específicas para atender toda esta conflictividad que tienen las ciudades y sobre todo casos como el de Cali, que son tan complicados y tan dramáticos.

Finalmente han terminado minando, yo diría, las capacidades mínimas que se han tenido y hoy lo que se requiere es generar un nuevo diseño institucional que garantice que todo este problema de la seguridad y la violencia puede ser atendido con muchas capacidades que no solamente son recursos, sino que también nuevos diseños".

Por su parte, el coronel (r) Carlos Soler el coronel abogado asesor en seguridad y defensa nacional, manifestó: “Si se hace un diagnóstico de las horas voladas por el Halcón, no se ve que, con todas las capacidades de más de un millón de dólares, se tenga en utilización por parte de la inteligencia.

Algo que es necesario es la coordinación conjunta de inteligencias de Dijín, Dipol, Cipol, Sijín, con la de la Tercera División del Ejército, el B2 de la Tercera Brigada, así como el oficial de inteligencia del batallón de Policía Militar. Eso es necesario mantenerlo y manejarlo para anticipar el trabajo coordinado también con inteligencia por parte del CTI, que tiene interceptaciones y puede tener un mapeo de lo que está sucediendo en Cali.

Hay que generar blancos para trabajo interinstitucional con objetivos claros, desmembrar estructuras de oficinas de sicarios que se rentan. Y por último, el tema de hacinamiento ha sido maltratado, el hacinamiento no sólo de cárceles, sino de centros transitorios".