EE.UU. y Canadá ofrecen recompensa de 2 millones de dólares por culpables de asesinato en Medellín

Los gobiernos de Estados Unidos y Canadá anunciaron una recompensa de hasta 2 millones de dólares (alrededor de 7500 millones de pesos) para dar con los autores materiales del homicidio de Jonathan Christopher Acevedo García, un colombo-canadiense que fungía como testigo del FBI contra una red criminal liderada por Ryan James Wedding.

El hecho se registró en el restaurante Mi Arepa, ubicado en el centro comercial Mall del Indio, en la vía Las Palmas. Según los reportes, un hombre habría abordado a Acevedo mientras almorzaba y le propinó múltiples disparos, causándole la muerte de forma instantánea.

Las imágenes de las cámaras de seguridad, recopiladas por las autoridades, permitieron identificar a los presuntos agresores y hacer seguimiento a su huida. Se movilizaban en una motocicleta, cuya placa, según la investigación, podría corresponder a una Yamaha Nmax.

La víctima, de 42 años, era considerada una persona clave en la lucha contra una estructura criminal transnacional. Desde 2023, Acevedo colaboraba con el FBI, aportando información sobre una organización con operaciones en Colombia, México, Estados Unidos y Canadá. Según se conoce, gracias a algunos de sus testimonios se lograron capturas entre agosto y octubre de 2024 en esos países.

Uno de los nombres más relevantes en el caso es Ryan James Wedding, un exdeportista olímpico canadiense, señalado como líder de la red criminal vinculada al narcotráfico. El FBI lo ha incluido entre sus 10 fugitivos más buscados y ha ofrecido una recompensa adicional de 15 millones de dólares para quien proporcione datos que permitan su captura.

Las autoridades estadounidenses han llegado a describir su organización como una de las más violentas y prolíficas en tráfico de drogas, con supuesta cooperación con el Cártel de Sinaloa.

Además del cartel publicado por las agencias internacionales, las descripciones de los sospechosos incluyen a un hombre alto, de tez blanca, que vestía pantalones azules, saco oscuro con capucha, gorra y zapatos blancos, y actuó desde un vehículo blanco antes de disparar.

Otro de los implicados, un hombre de complexión más robusta, fue captado por cámaras antes del asesinato, aparentemente tomando fotografías del lugar.

Tras el crimen, se desplegó un operativo de cooperación entre agencias colombianas, estadounidenses y canadienses para recolectar videos, realizar análisis forenses y rastrear a los presuntos homicidas.

Incluso, las autoridades han habilitado canales seguros para que cualquier persona que tenga información pueda hacer reportes a través de plataformas como WhatsApp, Signal o Telegram al teléfono +1-424-495-0614, o también por medio de consulados y embajadas, garantizando el anonimato de los informantes.