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Laura García, quien interpreta a la mamá de 'Helenita' habla sobre su personaje

Laura García interpreta a la inflexible madre de Helenita en ‘La Ronca de Oro’. “Espero que no me apedreen en la calle”, dice.

11 de febrero de 2014 Por: Redacción de El País

Laura García interpreta a la inflexible madre de Helenita en ‘La Ronca de Oro’. “Espero que no me apedreen en la calle”, dice.

Cuando Ana Julia Marulanda de Vargas le dice a Helenita “esa puñetera”, lo que quiere decir es “esa desgraciada”. Y cuando un novio de sus hijas hace visita en la casa y ella quiere dormir, les dice: “La visita tiene sueño”. Eso lo aprendió Laura García, consagrada actriz de teatro, sobre la mamá de Helenita Vargas (Doña Susana o ‘Mamá Cuchi’, como le decían sus hijas), que en la serie es llamada Ana Julia Marulanda de Vargas.En su investigación sobre el personaje, la actriz, directora y pedagoga teatral descubrió a través de la hermana de Helenita, la exmonja Alicia, que en la casa de los Vargas tenían un sitio donde tocaban tiple y guitarra.Allí pudo haberse iniciado musicalmente Helenita, quien llevó una relación difícil con su madre, especialmente cuando esta última supo que su hija se iba a casar con un hombre 20 años mayor, liberal y padre de la mejor amiga. Para colmo, Helenita se empeñaba en cantar rancheras, elección escandalosa en la Cali de los años 40.¿Cómo analiza al personaje que ahora encarna?Doña Ana Julia cree que tiene línea directa con Dios. Es controladora, no le gusta que nada se salga del libreto que ella ha escrito y que ha pensado para cada uno de sus hijos. ¿Qué se lleva del personaje?Amo muchos los personajes que he interpretado y me conmueve compartir con el elenco y la producción. Vi el primer capítulo cuatro veces y me encantó, agarra muy bien a la gente y la época se ve preciosa.¿Cuál ha sido la escena más difícil?La del primer capítulo, la quema del piano de Helenita. La hicimos a las 3:00 a.m., con un diluvio sobre Buga. Todo el suelo era lodo y los actores nos metíamos con miedo a que sonara, porque no podíamos dejar que ese sonido se colara. Fue un reto a la constancia, a la paciencia y al profesionalismo. ¿Este personaje tan fuerte la deja agotada después de cada escena?No, uno puede exorcizar muchas cosas personales a través de los personajes. De hecho, creo que los actores y actrices actuamos para eso, para tratar de amansarnos a través de los personajes. ¿En qué se basó para construir a la aguerrida Ana Julia?Hice una investigación del personaje, hablé con la familia de Helenita, con los amigos. Pero uno tiene que poner toda su imaginación, su creatividad al servicio del personaje y dejar que toda la fuerza, la energía, la sutileza, todos los matices salgan en el momento en que tienen que salir. Uno está para el personaje, no el personaje para uno. A uno como actor no le debe importar verse bonito. Yo, mientras más fea me vea, mejor me siento.¿Cómo cree que la gente la ve en ese papel de mamá dominante?Que me tengan miedito si van por la calle. (Risas). La gente a veces se confunde porque piensa que el actor y el personaje son iguales, espero que no me apedreen por ahí en la calle. ¿Qué piensa de la música de Helenita?Es divina, y estas dos niñas preciosas que hacen de Helenita cantan muy lindo sus canciones. Y es la voz de ellas, que es un gran logro, pues no están doblando.Desde ‘Correo de Inocentes’ no la habíamos vuelto a ver en TV. ¿Por qué?Después que terminé ‘Correo’ paré unos dos añitos en televisión y luego volví a trabajar con CMO, esta vez para Caracol, con Clara María Ochoa y Ana Piñeres, agradecida de que me hayan dado esa oportunidad. Me tienen confianza, yo también, somos amigas, nos respetamos inmensamente. Me encanta trabajar con Klych López y Liliana Bocanegra, los directores. No había trabajado con Liliana en ‘Correo’ y me encantó, es muy valiente, para una mujer abrirse camino en Colombia en la dirección es muy difícil.Y antes de ‘Correo’, pasaron muchos años sin salir en televisión...Sí, muchos. Lo último que había hecho era ‘Una mujer de cuatro en conducta’, que fue tal vez en el 82.¿Es muy exigente al elegir un papel?No contesto. Sin comentarios.¿Qué debe tener un personaje para que lo acepte?Me tiene que seducir la factura, cómo hacen la historia. Si tú vez ‘La Ronca de Oro’, parece cine. Para mí es muy importante que haya una belleza en el trato de las imágenes, una historia bien escrita, personajes que no sean de un solo color, sino que les pueda dar toda la flexibilidad sicológica que necesiten. Y que si al director no le gusta, te lo diga.En un canal de telenovelas están dando ‘Teresa Valverde’. ¿Qué recuerdo le trae esa telenovela?Uy, Dios mío, no. Eso fue hace muchos años. ¿En qué canal? Eso sí está chistoso. Era linda. Me acuerdo que la apertura de la telenovela era que ella se balanceaba en un columpio. ¿Esa fue televisión blanco y negro? ¿No? ¿Color? ¡Ah! Bueno.Teresa Valverde era independiente como Helenita...Sí, así, muy rebelde, como he sido yo un poquito. Hay que ser rebelde.¿Qué es lo más rebelde que ha hecho?Irme para Cartagena cuando estaba joven, a crear un grupo de teatro, a dirigir, a enseñar, a escribir, a transmitir. Fue importante para mí en ese momento.Y usted, ¿se entendía con su mamá? Tengo esa imagen bella de estarla cepillando -porque tenía el pelo larguísimo- los domingos por la mañana, y metiéndome en la cama con ella.¿Con sus hijos es así de exigente como Ana Julia lo es con Helenita?Lo fui, pero también fui muy amiga de mi hijo. Ya no vivo con él y los papeles se invirtieron, ya él me regaña a mí. Nos tocó vivir solos, hice de mamá y papá y él trabaja en algo diferente. Siempre le dije “no me importa lo que tú hagas, mientras lo hagas porque es lo que quieres hacer, porque amas eso, y vas a hacerlo como mejor sabes hacerlo”.

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