“El próximo Concejo de Cali debe representar realmente a los caleños”

POR JOSÉ LUIS CARRILLO / EDTITOR DE CALI

Según el Observatorio Cali Cómo Vamos, 44 de cada 100 caleños califican como mala la gestión del Concejo local y solo 9 de cada 100 la califican como buena.

Este es solo un indicador que revela la inconformidad ciudadana con la corporación que debería ser el espacio de debate y control a la Alcaldía, pero que, a la vista de analistas, se convirtió en la plataforma de las estructuras políticas tradicionales para acceder a puestos burocráticos y contratos de la Administración Municipal.

Por ello, desde el Cabildo se edifican las bases de las estructuras de votantes que definen sus apoyos a la Alcaldía de Cali.

Frente a lo que se juega en el Concejo, Julián Jiménez, analista político y docente de la Universidad Icesi, manifiesta que esta corporación está monopolizada, capturada por un grupo de políticos que no han estado a la altura, “y esto se refleja en todas las aprobaciones que le han hecho al alcalde Jorge Iván Ospina”.

Sostiene que es paradójico, porque el Mandatario local tuvo una baja popularidad en la Alcaldía de Cali, pero contó con el apoyo de todos los políticos tradicionales, lo que le dio vía libre a casi todas las iniciativas que impulsó.

“Eso significa que el alcalde Jorge Iván Ospina cumplió los compromisos que tenía con ellos. En el Concejo, el proceso será lamentable, porque habrá muchos políticos tradicionales que repetirán en estas elecciones y eso significa que no habrá cambios notables”, precisa.

El docente afirma que los que están actualmente en el Cabildo de Cali no representan a la ciudad: “No representan a esa clase media caleña, pujante, que mantiene la ciudad. Es una ruptura muy grande que se tiene con el ciudadano”.

Por su parte, la analista política María Alejandra Arboleda manifiesta que hay un cansancio generalizado entre los concejales y los caleños.

“En el Concejo creo que no habrá muchos cambios, pero sí debe ser un ente que vuelva a realizar un control en la Alcaldía de Cali, para que se aprueben los presupuestos y políticas que realmente necesita la ciudad. El Concejo no puede seguir siendo visto como ese brazo cómplice de la Alcaldía”.

A su vez, el estratega y analista político Álvaro Benedetti sostiene que esta corporación siempre se ha caracterizado por representar un antivalor, el cual no promueve un escenario democrático transparente, sino un nicho clientelista y de oportunidades políticas.

“Hay históricamente decepciones por parte de políticos y partidos, pero en este último periodo ha sido un Concejo acomodado a la contratación pública, han sido poco críticos frente a la administración de Jorge Iván Ospina, con pocas excepciones”, manifiesta.

Benedetti agrega que, basado en la experiencia reciente, en la elección del nuevo Concejo de Cali habrá más continuismo que renovación.

“Las maquinarias electorales van a favorecer que los concejales vuelvan a ser elegidos. Habrá poca renovación, poca independencia y no habrá mayor promoción del voto de opinión”, anota el asesor político.

Entre tanto, Lina Martínez, de Polis, explica que la figura del Concejo de Cali debe dar equilibrio a la gobernanza.

“Se esperaría que se diera una renovación política, ver caras nuevas, con lo bueno y lo malo. De esos procesos salió una figura como Diana Rojas, que dinamizó el debate y tiene otra manera de hacer política, tienen otras ideas. Ojalá se den propuestas diferentes para darle un aire al panorama electoral”, concluye.

Según el Observatorio Cali Visible en su volumen 8, que comprende enero y abril 2023, todos los proyectos de acuerdo radicados en la Comisión de Presupuesto del Cabildo local fueron aprobados en primer debate.

De igual manera, según el mismo informe, ningún concejal de esta comisión, durante dicho periodo, presentó algún proyecto de acuerdo. Todos fueron de iniciativa del alcalde Jorge Iván Ospina.