Educación
Profesores en Bogotá lograban ascensos con falsos diplomas; esta es la historia
La Procuraduría adelanta la investigación debido a los pocos avances que ha arrojado el Distrito sobre estos casos.
La Procuraduría General de la Nación abrió 40 procesos disciplinarios contra profesores de colegios públicos que, con diplomas falsos, habría no solo conseguido trabajo, también ascensos y, por supuesto, incrementos salariales.
Incluso, se investiga si habría irregularidades al interior de la Secretaría de Educación.
Según informó Semana, esta situación estaría afectando a más de 700.000 estudiantes y sus familias del Distrito capital.
Hace algunos meses, la Procuraduría General, viene adelantando la investigación, tras descubrir que en la Secretaría de Educación existirían serias irregularidades a la hora de verificar la autenticidad de los diplomas y al parecer no estarían aplicando las respectivas sanciones a los responsables.
Según Semana, algunos maestros lograron trabajar y pensionarse sin ningún tipo de formación.
La procuradora primera distrital de Bogotá, Helga Lidby Díaz, es la encargada de verificar la autenticidad de los diplomas, los cuales tendrían errores que se notan a simple vista.
Pero, las mismas universidades han confirmado que los supuestos maestros nunca realizaron ningún tipo de estudio en los centros de educación superior.
Es el caso de Sandy Yolima Rodríguez, quien fue docente de la Secretaría de Educación de Bogotá. La mujer presentó diplomas como licenciada en educación preescolar y magíster en ciencias de la educación.
Sin embargo, las universidades Antonio Nariño y San Buenaventura confirmaron que no hizo parte de ningún proceso de formación.
La Procuraduría formuló cargos contra Rodríguez porque “Es posible concluir, sin temor a equívocos, que los títulos presentados contienen información que no se ajusta a la realidad. Es decir, estos nunca fueron otorgados por las universidades antes señaladas. La disciplinada no cursó estudios y consecuentemente no cumplió los requisitos de grado para obtener esos títulos”, cita el medio mencionado.
En su investigación, la Procuraduría ha encontrado en los más de 40 procesos disciplinarios que tiene en la actualidad hallazgos que darían cuenta de que se estarían pagando 100.000 pesos por adquirir un diploma falso en pregrado, especialización o maestría, y el mismo ente de control ha calificado como “burda” la forma en que los están haciendo.
Uno de los docentes implicado sostuvo que “quiero pedir perdón a la Secretaría de Educación por los actos cometidos, y el hecho de no tener una estabilidad económica, un trabajo y una afiliación a salud me llevaron a un estado de estrés, desesperación e impotencia y, por ende, a cometer este tipo de falta (...) de antemano solicito desde lo más profundo de mi corazón se me perdone”.
Este tipo de conductas no solo terminan en sanciones de destitución e inhabilidad hasta por 20 años, sino también en procesos penales en la Fiscalía por falsedad en documento público.
De otro lado, la investigación de la Procuraduría se centrará en revisar qué está ocurriendo en la Secretaría de Educación de Bogotá, donde hay fallas en el proceso de verificación de las hojas de vida y de los diplomas.
La Secretaría de Educación informó, por su parte, que ha sancionado a 126 personas por medio del control disciplinario interno que manejan, pero para acudir a ese mecanismo se debe tener en cuenta los “comportamientos que estén claramente tipificados como faltas disciplinarias al momento de realizar la conducta”.
Ahora hay que esperar que culminen las investigaciones disciplinarias, fiscales y penales para poder realizar el recobro de los salarios.