El pais
SUSCRÍBETE

¿Son caros los servicios bancarios? Responde el caleño que preside Asobancaria

Santiago Castro analiza el impacto del alza en las tasas de interés y lo que viene para la economía colombiana en el 2016.

6 de diciembre de 2015 Por: Alfredo García, reportero de El País

Santiago Castro analiza el impacto del alza en las tasas de interés y lo que viene para la economía colombiana en el 2016.

Debido al alza en las tasas de interés y la desaceleración de la economía, los hogares y empresas colombianas moderarán su endeudamiento en el 2016, y así lo prevé la propia banca. 

Tanto que el presidente de la Asociación Bancaria, Santiago Castro, calcula que el crecimiento del crédito será del 6,7% el año próximo, sin que ello constituya un serio motivo de preocupación.

Según el dirigente, Colombia en esta coyuntura debe trabajar más en la profundización del crédito hipotecario, ya que sus niveles son aún bajos respecto a  Latinoamérica, lo que no ha permitido que más hogares se hayan bancarizado. 

El 2015 fue un año de altibajos en la economía debido a la crisis del petróleo. ¿Qué tanto impacto recibió la banca colombiana por esta coyuntura difícil? 

A pesar de la volatilidad e incertidumbre que hemos tenido en los mercados financieros, los indicadores sugieren que la banca colombiana ha salido bien librada, y se mantiene como un sector muy sólido en la economía colombiana. Esto se aplica también para el 2016. Y un ejemplo de ello son los resultados financieros con corte a septiembre indican que el sistema tuvo una utilidad de $7,57 billones (mayores a las del 2014) dentro un contexto de activos que suman $442 billones. Además, hubo un retorno sobre activos que alcanzó el 2,1% de crecimiento.

En resumen, el nivel de exposición de la banca a la crisis petrolera no fue tan grande como se esperaba frente a ese choque tanto local como internacional.  

Eso significa que la demanda de crédito por parte de empresas y hogares no tuvo un freno como muchos previeron...

El crecimiento de la cartera y la demanda de capital de la economía colombiana, a pesar del bajonazo en el crecimiento, en el sector financiero se mantuvo. Esto no ha ido en detrimento de los indicadores. Solo el 3% de la cartera bancaria se encuentra vencida, un nivel muy aceptable. Incluso estamos mejor que el año pasado, cuando estaba en 3,1%.

Para el 2016, ¿cómo visualiza el impacto que podrían tener las últimas decisiones del Banco de la República al subir las tasas de interés?

Creo que se van a moderar las tasas de crecimiento en la toma de créditos (por hogares y empresas). En lo corrido del 2015  hemos tenido un crecimiento del 7,7% real en préstamos de consumo, pero esta cifra fue inferior a la del 2014, que para esta época estaba en 8%. Pese a la desaceleración, los bancos han mantenido una política activa  en la colocación de crédito y la demanda sostenida de los hogares.

Pero para el 2016 sí creemos que se va a bajar un poco más la aprobación de créditos, y nuestro cálculo es pasar a 6,7% en crecimiento. Sin embargo,  una desaceleración de un punto porcentual no será grave a pesar del difícil entorno, pues la banca seguirá apalancando el financiamiento de la economía y los hogares.

Lea también: “Hoy, las tasas son competitivas”: Santiago Castro, presidente de Asobancaria

Más gente en la banca

¿En medio del freno en la economía, a qué nivel de bancarización se llegó este año?

Seguimos muy rezagados frente a los niveles de Europa. A junio del 2015 había un índice de bancarización del 75,9%. Es decir, que casi 76 adultos de cada 100 tenían un servicio financiero. Eso es bajo frente a niveles como los de Chile y Brasil.

Lo positivo es que tenemos unas metas de llevar esa bancarización hacia el 2018 a niveles del 84%. Pese a ello, Colombia ha tenido avances en los últimos años, pero ese indicador aún sigue siendo bajo para un país con una economía como la nuestra.

Pero ese panorama no es demasiado optimista teniendo en cuenta las amenazas sobre la economía y el temor de los hogares a endeudarse más...

A pesar de que las cuentas fiscales del Gobierno muestran un estancamiento, el gasto de las familias se sigue comportando bien, lo cual es una buena noticia. Sin embargo, el crédito hipotecario está creciendo a tasas del 11%, que es mayor al endeudamiento de los hogares el cual  aumentó en 9%.

Eso significa que los préstamos para vivienda crecerán aún más en el 2016, sin representar un riesgo para la banca, pues la garantía es el inmueble mismo.

¿Llegó en mala hora o no, el alza de las tasas de interés por parte del Emisor para frenar la inflación?

Creemos que esas decisiones (de subir las tasas al 5,50%) respondieron a unas expectativas de inflación desbordada. Por eso no lucen exageradas las medidas de elevar    la tasa de interés. Obviamente, esto puede tener un impacto colateral al restarle dinamismo a la demanda interna y a la dinámica del crédito, pero el Banco de la República siempre ha ejercido    un mandato de trabajar por el control de la inflación, que se convierte en el mayor impuesto para los sectores más vulnerables de la población.

¿No cree que al encarecerse el crédito, muchas familias podrían comenzar a ‘colgarse’ en sus pagos?

La cartera bancaria en Colombia representa el 45% del Producto Interno Bruto, PIB. Un país con niveles similares de desarrollo al de Colombia está usualmente en un 60%. Ese rezago no viene tanto de los hogares —que tienen un endeudamiento normal frente a nuestro nivel de ingresos— sino de la cartera hipotecaria. No estamos ni siquiera a los niveles que teníamos en la precrisis del año 1999, y estamos muy desfavorablemente respecto al promedio de países de América Latina. Por eso, un mayor incremento de ese tipo de cartera a largo plazo sería fundamental para poner al día a Colombia en materia de profundización financiera.

¿No será que ese rezago obedece a que aún muchos colombianos le temen a los bancos por costosos?

Es innegable que una subida de 1% (por parte del Emisor) tendrá un impacto en las tasas de la banca, que afecte al consumidor y a las empresas. Eso se da por descontado porque los bancos son un canal de transmisión de esos ajustes. 

Sobre el mito de que los márgenes de intermediación (captación de recursos vs colocación de préstamos) son excesivos, debo decir que no son tan altos como se cree.

Según las últimas cifras del Fondo Monetario Internacional, FMI, en el 2014 el margen de intermediación financiera en Colombia fue de 6,7% mientras el promedio de la región alcanzó el 7,4%. O sea que nosotros estamos un punto por debajo de ese promedio latinoamericano. 

Y si hablamos de las tasas de interés simples y puras, el promedio en Colombia es del 10,9%, y la media en la región estaba en 13,2%. 

Lea también: Banca colombiana es la segunda más barata de la región: Asobancaria

Sacar dinero de un cajero, hacer una transferencia y utilizar otros servicios bancarios sigue siendo caro en Colombia. ¿Existe la posibilidad de que estos costos sigan bajando?

Los cobros por servicios que hay en el sistema bancario colombiano son unos de los menores en Latinoamérica. Colombia es de los que menos cobra por cuentas de ahorros, cuotas de manejo en tarjetas débito y de crédito, y retiros de oficina. 

Ese índice de precios de servicios financieros ha crecido a una menor tasa respecto al Índice de Precios al Consumidor, IPC. En promedio para el bolsillo de los colombianos esos costos se han ido abaratando en los últimos años, además, de que ya existen servicios gratuitos como las transacciones telefónicas y por internet. Otros servicios son los segundos más bajos de la región, tanto que los retiros por cajero electrónico están por debajo de los de Argentina, Brasil y Venezuela, debido al nivel de competencia entre las entidades. 

Teniendo en cuenta la presencia de algunos nubarrones sobre la economía colombiana, ¿a qué tasa de crecimiento le apuesta para 2015 y 2016?

Creemos que las expectativas del Gobierno de crecer a  un 3,5% muy difícilmente se cumplirá este año. Si vemos los riesgos existentes, ese crecimiento es a la baja ya que tenemos una política monetaria restrictiva, elevados niveles de inflación y poca velocidad en la recuperación del agro  y la industria que se dijo iban a reaccionar a la nueva tasa de cambio. Sí creo que van a reaccionar, pero ese será un proceso más lento, y más que aún porque no se ha dado una subida de tasas por parte de la Reserva Federal. No veo, por tanto, crecer por encima del 3%, pero será un gran logro dentro del contexto internacional. Para el 2016 con un PIB creciendo al 3% debemos darnos por bien servidos.

¿Con los $50 billones de inversión en infraestructura, esa cifra podría crecer más?

Eso ya se está dando por descontado, con lo cual se ha evitado que los crecimientos del PIB sean menores. Ese 3% no es un fracaso, sino por el contrario,  un gran logro dentro de la crisis que vive América Latina.

"Colombia  sigue siendo un mercado muy atractivo para la banca. Se pasó de activos de $76,8 billones en 2002  a $442 billones en 2015, una cifra muy importante”.

"La banca colombiana tiene hoy mayor presencia en el extranjero. Hay inversiones cuantiosas en Centroamérica y el Caribe”, Santiago Castro, presidente de la Asociación Bancaria de Colombia

AHORA EN Economía