Estudio revela que migrantes venezolanos aportan millonaria cifra al año a las economías de América Latina y el Caribe

Este jueves 18 de diciembre del 2025 se conmemora el Día Internacional del Migrante y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) revela un nuevo estudio sobre el impacto de la migración de ciudadanos venezolano en países de América Latina y el Caribe.

En ese sentido, la investigación asegura que los hogares venezolanos contribuyen con más de USD 10.600 millones al año a las economías de América Latina y el Caribe, principalmente a través del gasto en vivienda, alimentos, educación y servicios de salud.

“Los países de América Latina y el Caribe han comprobado que la migración es una fuente de crecimiento económico, así como de creatividad y dinamismo. Los hallazgos de este estudio muestran claramente que cuando los gobiernos amplían las oportunidades para las personas migrantes a través de procesos de regularización e integración, toda la sociedad se beneficia”, destacó Maria Moita, directora regional de la OIM para América Latina y el Caribe.

Asimismo, el informe señala que las personas migrantes venezolanas realizan valiosos aportes fiscales, que representan alrededor del 1,2% del total de la recaudación tributaria en los países analizados. En el caso de Colombia, la contribución ha superado los USD 529 millones en un solo año.

Además del consumo y la recaudación pública, los emprendimientos venezolanos también emergen como un poderoso motor para la creación de empleo. Las empresas lideradas por personas migrantes han generado aproximadamente 40.000 puestos de trabajo en Panamá y han impulsado inversiones que superan los USD 1.100 millones en Aruba.

Según la OIM, dichos emprendimientos fortalecen las economías locales, fomentan la innovación y dinamizan sectores como la tecnología, el turismo y la gastronomía.

El análisis que se basó en investigaciones realizadas desde 2021 en Colombia, Panamá, Ecuador, Chile, Costa Rica, República Dominicana, Perú y Aruba, confirma que las personas migrantes venezolanas son altamente productivas y cuentan con una sólida formación técnica y universitaria que responde a las necesidades de los mercados laborales de los países de acogida.

A pesar de lo anterior, este potencial sigue estando limitado. Se estima que el 82% de las personas venezolanas en la región trabaja en el mercado laboral informal y que el 41% no tiene acceso a crédito ni a servicios financieros formales. Estas barreras restringen su autonomía económica, el crecimiento de sus negocios y su capacidad de contribuir aún más sustancialmente al desarrollo local.

Sobre el impacto económico, el estudio resalta que ha sido posible, en gran medida, por los esfuerzos de Gobiernos de acogida por ampliar los procesos de documentación y regularización.

De los 6,9 millones de personas venezolanas que viven en la región, cerca del 70% cuenta actualmente con un estatus migratorio regular, lo que le ha permitido a millones de ellas acceder a oportunidades que antes estaban fuera de su alcance y avanzar gradualmente hacia una participación plena en las economías formales.