Comisión de la Verdad urgió a las autoridades tomar medidas para proteger líderes en Bojayá

La Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición rechazó este lunes las amenazas a los líderes sociales del Chocó y solicitó a las autoridades "tomar las medidas urgentes y necesarias para esclarecer la verdad y garantizar la vida" de los defensores de derechos humanos.

En un comunicado, la entidad creada en el marco del acuerdo de Paz y presidida por el padre Francisco de Roux, se refirió al caso del líder Leyner Palacios, amenazado el pasado viernes 3 de enero.

"En días anteriores recibimos un informe sobre los horrores del conflicto armado en ese territorio por parte de la Comisión Interétnica de la Verdad del Pacifico, cuyo secretario técnico, Leyner Palacios es uno de los amenazados", indicó el comunicado de la Comisión de la Verdad.

El documento recordó que Leyner es una de las 60 víctimas del conflicto armado que estuvieron en La Habana durante las negociaciones entre el Gobierno y la entonces guerrilla de las Farc. Además ha participado de los encuentros para la confianza que se han realizado entre víctimas y desmovilizados en los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación, Etcr.

"Acompañamos por invitación de las víctimas los actos de entrega de los 78 cofres de madera con los restos identificados de la terrible masacre de Bojayá. Allí fuimos testigos de la valentía de los hombres y mujeres de esa orilla del Atrato, pero también recibimos con dolor las noticias de los nuevos desplazamientos, el confinamiento, el reclutamiento de menores y los asesinatos. Bojayá no puede repetir esa tragedia", advirtieron.

Lea también: Procuraduría pidió al Gobierno "tomar medidas urgentes" sobre situación de Bojayá

La Comisión instó a las autoridades locales, regionales y al Gobierno Nacional a tomar de manera urgente las medidas que permitan esclarecer la verdad y proteger la vida de líderes y lideresas de las comunidades en peligro.

Así mismo, exigió al ELN y demás grupos armados respeto y el "cese de las agresiones sobre la población de Bojayá y del bajo Atrato".