El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Cali

Artículo

Otro hundimiento vial subterráneo enreda al MÍO

El costo del hundimiento vial subterráneo frente a la Estación del Ferrocarril pasó de $35.000 a $80.000 millones. Proyecto se mantiene en sigilo.

6 de febrero de 2011 Por: Luiyith Melo García, reportero de El País.

El costo del hundimiento vial subterráneo frente a la Estación del Ferrocarril pasó de $35.000 a $80.000 millones. Proyecto se mantiene en sigilo.

Un nuevo hundimiento vial para darle paso al sistema de transporte masivo de Cali entre el centro y el norte de la ciudad, ha generado una ‘secreta’ pero dura polémica al interior de Metrocali, empresa promotora del MÍO. Se trata de la construcción de un intercambiador subterráneo frente a la estación central del Ferrocarril, debajo de la glorieta que hay en ese sector. La obra, que inicialmente implicaba una inversión de $35.000 millones y hoy va en cerca de $80.000 millones, aún no tiene diseños consolidados, no cuenta con financiación definida, ha sido manejada con sigilo por Metrocali y no tiene buen ambiente en el Gobierno Nacional que cofinancia el 70% del MÍO.Sin embargo, en mayo del año pasado, Metrocali había dicho que licitaría la obra en los dos meses siguientes, lo que por supuesto no hizo, porque en el camino se ha encontrado con tropiezos como que buena parte del área a intervenir tiene media docena de bienes de conservación patrimonial que no se pueden afectar.La historia comenzó hace más de siete años cuando la Universidad Nacional diseñó una solución vial para la glorieta de la Estación del Ferrocarril, pero a superficie. Es decir, consideró unos módulos alrededor de la glorieta. El problema es que no tuvo en cuenta que en el área había edificios y elementos calificados como patrimonios nacional y municipal.Esto hacía imposible instalar módulos y estaciones en superficie, por lo cual Metrocali decidió hace un año revisar los diseños con el fin de hacer una contratación segura del proyecto y no repetir lo que pasó con la terminal de Calima que se contrató hace años y sigue enredada por líos de diseños.Entonces el proyecto se cambió. Como se sabe, en la glorieta confluyen muchas rutas de transporte e importantes carriles de tránsito como la Avenida Vásquez Cobo, La Avenida Estación, las Américas, la 3N, la 4N y las calles 25 y 26, todo lo cual resulta complejo de articular técnicamente en una solución que garantice un flujo racional de transporte y desenrede el nudo que existe hoy.En ese sentido, la Junta Directiva de Metrocali y los técnicos exploraron seis alternativas, entre ellas colocar vagones (estaciones) en la Avenida 3N, separar los flujos vehiculares, construir un puente elevado sobre la glorieta, y hacer un hundimiento bajo la glorieta.En ese momento algunos arquitectos, como Juan Carlos Vallecilla, ex presidente de la Sociedad de Arquitectos del Valle, advirtieron que en la zona hay bienes urbanos que son patrimonio cultural y deben preservarse. Uno es el edificio de la Estación Central del Ferrocarril (sede de Metrocali) que es un bien de interés cultural de la Nación, al igual que su área adyacente y está sujeto a condicionamientos del Ministerio de Cultura. Entre otras cosas, no puede afectarse su visual con otras construcciones.Pero no es el único. Al lado de este inmueble hay otros bienes que están declarados “de interés cultural municipal” según el Acuerdo 232 que regula el patrimonio local. Ellos son: la Terminal de Transportes, la Clínica Rafael Uribe del antiguo Seguro Social, la Clínica Nuestra Señora de los Remedios, la glorieta misma con sus banderas y su fuente que se hicieron para los Juegos Panamericanos, la locomotora instalada en frente a la Estación, una pila de la Terminal y la glorieta de la Solidaridad que está después del puente elevado, en la Avenida 3N con 34. Esos bienes están sujetos a conservación y tocarlos requiere autorización de la Dirección de Monumentos Nacionales.Por todo ello, se concluyó que técnicamente era mejor hacer un intercambiador vial subterráneo para el MIO a fin de desatar ese nudo vial, conectar las troncales de las Américas y la Tercera Norte, organizar el transporte público colectivo por el sector y separarlo del tráfico mixto en superficie, dándole soluciones a los peatones y las ciclorrutas.En mayo del 2010 se estimó que este proyecto costaría $35.000 millones e incluiría las intervenciones alrededor de la glorieta, la estación subterránea y la estructura vial del sector.Pero hace unas semanas, Metrocali presentó un nuevo proyecto, más amplio, que considera la glorieta de la Solidaridad y el reforzamiento del puente vehicular que hay entre ésta y la glorieta de la Estación para soportar el paso de los buses articulados. A la estación subterránea se le hicieron también adiciones y acabados artísticos, todo lo cual elevó el costo del proyecto a $78.000 millones. FinanciamientoFrente a la propuesta, directivos de Metrocali como el viceministro de Transporte, Felipe Targa, y el asesor del ministerio Juan Gonzalo Jaramillo consideraron que “los diseños son bonitos, pero suntuarios y su alcance económico está por fuera del marco presupuestal aprobado por la Nación” para el MIO.Por eso, la preocupación ahora es cómo se financiará este proyecto y cuál sería el esquema para hacerlo.Algunos directivos opinaron que no es conveniente que la ciudad se comprometa con una inversión de esa magnitud en una glorieta y otros proponen que se opte mejor por una solución temporal mientras se consiguen recursos en el futuro para hacer el proyecto definitivo.“Yo creo que todo lo temporal se queda permanente”, dijo Rodrigo Mejía, representante de la veeduría de la Cámara de Comercio en la Junta de Metrocali y por eso se mostró partidario de optar por una solución definitiva. “No podemos repetir la situación de la Calle 13”, dijo, una vía que no se hundió y hoy es un adefesio para la ciudad.El viceministro Targa señaló que “un gran sistema como el MÍO ofrece la oportunidad de hacer estas obras que generan renovación urbana y eso esta bien, más aún si se ofrece una solución de movilidad no sólo al transporte público sino al particular”.Sin embargo, advirtió que “estamos en un escenario en el que hay escasez de recursos y tenemos problemas en el país donde hay grandes obras en marcha como el MIO”. Además, el plan de inversiones de un sistema exige seguir invirtiendo “y el dilema es que la inversión requerida está por encima de los recursos que están presupuestados para el intercambiador y aplicarlos allí obligaría a no hacer otras inversiones que son prioritarias para el sistema”, anotó el viceministro.El directivo Juan Gonzalo Jaramillo, a su vez, indicó que este “es un proyecto de cierta complejidad en alcance y valores y se requiere un análisis muy juicioso. Es entendible que la administración quiera desarrollar ese proyecto como aporte al progreso, pero en el tema financiero tenemos que revisar detalles para poder establecer bien en qué es lo que la Nación podría intervenir”.Rodrigo Mejía considera que “Cali se merece la mejor arquitectura y la mejor ingeniería y el proyecto presentado es rico en espacio público y reorganiza los distintos flujos de transporte en ese sector”, pero estima que “aún le falta una revisión definitiva”.Metrocali, por su parte, ha guardado silencio frente al tema. Pese a la insistencia de El País, el presidente Luis Eduardo Barrera no se refirió al proyecto que ha tenido sucesivos cambios y sajustes en sus diseños y en su presupuesto que, como se dijo, pasó de $35.000 a casi $80.000 millones en pocos meses.Sin embargo, el funcionario dijo hace algunas semanas que los recursos faltantes para el proyecto (es decir, los que rebasen el convenio de cofinanciación con la Nación), podrían provenir de un crédito que asumiría el Municipio.Metrocali está contratando un crédito sindicado del orden de $200.000 millones que se pagaría con vigencias futuras para concluir las obras que hacen falta, como terminales del sistema y pretroncales, dentro del cual se está contemplando incluir también el valor faltante del intercambiador subterráneo en la glorieta de la Estación del Ferrocarril.Se conoció que también se ha contemplado la posibilidad de comprometer más vigencias futuras para pagar este proyecto y aplicar a él los excedentes financieros del Municipio.Lo cierto es que por ahora, la Junta Directiva de Metrocali no ha dado un concepto final frente al diseño técnico del proyecto. En la junta del próximo 16 de febrero se volverá sobre el tema y el debate promete estar al rojo vivo.Costo de oportunidadEl viceministro de Transporte, Felipe Targa preguntó “cuál es el costo de oportunidad de invertir esos recursos (cerca de $80.000 millones) en esta obra y sacrificar otras inversiones, o si habría otros recursos para hacerlo, porque el sistema (MÍO) se financia con un convenio de cofinanciación entre el Municipio de Cali y la Nación que pone el 70% con recursos que son finitos y a lo mejor se quedarían sin hacer otras obras que requiere Cali”.Otra propuestaMetrocali le pidió al ingeniero Germán Arboleda, experto en sistemas viales, que revisara el proyecto de subterranización de la estación.Arboleda consideró que el proyecto era faraónico y en vez de revisarlo decidió hacer una nueva propuesta que consistió en construir una estación similar a la de Cañaveralejo (Cosmocentro), debajo de la glorieta del ferrocarril.El proyecto de Arboleda cuesta unos $20.000 millones, pero Metrocali no consideró esta contrapropuesta y decidió mantener su proyecto, pero sin revelarlo a la luz pública.

AHORA EN Cali