En Feria, extranjeros llenan hostales al estilo europeo en Cali

Hospedajes tipo europeo fueron apetecidos por los huéspedes que buscan gozar de la feria y a sentir la caleñidad en las fiestas.

Sentirse caleño  es  la  experiencia que  buscan  europeos, estadounidenses y hasta latinoamericanos que llegan enamorados de la Cali de la salsa, el chontaduro, la lulada,  la brisa y la naturaleza y... de la Feria de Cali. Esta invasión extranjera, que atraída por el imán de la caleñidad hizo explotar el ‘boom’ de los hostales en Cali, colmó estos albergues al estilo  europeo,  hechos para viajeros autosuficientes, distintos a los hoteles en el tipo de acomodación y servicios. Alemanes, franceses, británicos, suizos, noruegos, suecos, holandeses, estadounidenses, argentinos, australianos, entre otras nacionalidades, llegaron para  sentir el ‘tumbao’ de la salsa en su propio cuerpo,  justo en época de Feria y así apropiarse de  la caleñidad en su máxima expresión. Tanto que algunos llegaron con anticipación para aprender a bailar salsa e integrarse al Salsódromo o aprender a tocar instrumentos autóctonos y participar en algunas comparsas del desfile del Carnaval de Cali Viejo. Además de que en algunos casos las tarifas son  más bajas frente a  las de un hotel, el  encanto del hostal está en que  el visitante se siente como en casa: puede elegir  habitaciones privadas o compartidas y disfrutar de zonas comunes  para interactuar con otros turistas, incluida la cocina para preparar sus alimentos. Ese es el éxito de Colombian Home Hostel, el mejor calificado en Cali por Trip Advisor y Hostel World, páginas especializadas en hostales. Su ocupación es del 70% u 80 % en temporada baja, pero por estos días estaba más lleno que la Calle de la Feria. “Nuestro gran plus es que el huésped es atendido por sus propietarios, no por  administradores”, opina el arquitecto Mauricio Esparza,  quien  abrió el hostal en 2011 con su hermana, la abogada  Carolina Esparza.A  los encantos de esa ciudad rumbera y  rodeada de verde,  suman detalles como   albergues  temáticos tipo El Viajero, una cadena de Uruguay, que se expandió a  Suramérica y llegó hace  año y medio al barrio San Antonio. En El Viajero la decoración es  justamente alusiva a la salsa, el ritmo que identifica a Cali y su Feria.  Si se desea una acomodación privada,  se puede pernoctar en la alcoba de  Héctor Lavoe, Celia Cruz o Rubén Blades o cualquier otra estrella de la Fania. Y si prefiere  dormitorio compartido la decoración es  circense, alusiva a   Circo para Todos o a coreografías de  salsa, espectáculos que les ofrecen cada  noche en el bar junto a la piscina. Allí les dictan también clases de  yoga y salsa gratis, preparatorias a las salidas a Alalae, sitio de rumba en el barrio Alameda que las noches de jueves  presenta bailarines que  los invitan a  la pista a bailar, si el extranjero no tiene pareja o así no haya cogido el  ritmo. Ronald Hurtado, administrador de El Viajero, opina  que la tendencia del hostal va en aumento tanto por la diferencia de precios, como por  el tipo de acomodación: “Los dormitorios  en común les permiten conocer personas de otros lugares y culturas, hacen nuevos amigos y eso lo hace más acogedor”. Cotelco  no tiene  cifras de cuántos hostales atienden la ola de turistas extranjeros que gustan de Cali, pero Hurtado se atreve a decir que en los últimos cinco años han aumentado entre un 40% y 50% en San Antonio y El Peñón, barrios apetecidos por su arquitectura tradicional, sus jardines interiores, pisos empedrados y decorados, puertas de madera y techos muy altos que hacen más fresca la estancia.    Mauricio   vende el concepto de  Cali  más allá de la salsa y de la Feria. En  Colombian Home Hostel les lleva a otras  experiencias  como las salidas a Pance,  Lago Calima,  cerros tutelares, a San Cipriano, el Zoológico de Cali, considerado el mejor de Suramérica,  o a los sitios de rumba en el barrio Alameda,  Juanchito o La Topa Tolondra, famosa por los  intercambios idiomáticos de extranjeros al ritmo de salsa. Entre  sus visitantes inolvidables están unos artistas que a cambio de hospedaje, le pintaron tres  murales, incluido uno con  los sitios icónicos de Cali,  en la terraza donde dictan las clases de salsa, más en época de Feria. 

[[nid:495009;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/270x/2015/12/entora5oct25-15n1photo03.jpg;right;{Wepa House. Empezó como una tienda de tablas para ‘surf’ y ‘skate’ y se expandió a hostal y agencia de deporte extremo.Fotografía: Bernardo Peña|El País}]]Teo Mejía es un caleño que terminó abriendo el  hostal Wepa House porque la demanda así se lo exigió. Él y otros socios tienen  la  fábrica y tienda Wepa de tablas de ‘skateboard’ y ‘surf’, en el barrio San Antonio.

Con   la avalancha de extranjeros que llegaban a comprar estos implementos y preguntaban por hostales y planes de deporte extremo, terminó abriendo Wepa House  hace un año.  Le ha ido tan bien que hizo una  ampliación en la casa para doblar la capacidad   de ocho personas a unas 16 para este diciembre.  Y complementó con la agencia Wepa Tours, que ofrece planes como    el Salsa Tour o salidas a  sitios clásicos de rumba  como  La Colina en Alameda, que se colma en  días de feria. Y si no quieren baile, están el   Citytour, Beach Tour a Ladrilleros o  San Cipriano Tour. "Nos prefieren porque mucho turista extranjero viene con deseos de surfear y no espera que les tengamos el plan, pero se lo ofrecemos con clases incluidas en Ladrilleros”, comenta. De ahí que sea el hostal elegido por deportistas extremos como surfistas y ‘skaters’,  artistas y grupos de música como el francés L’Epoque y DJs. Hurtado se precia de hospedar a los artistas que vienen a festivales tan importantes como el Petronio Álvarez o A Jazzgo, pero lo sorprendió Gerry Teldon, un estadounidense  que a sus 90 años  viaja con  total autosuficiencia. Pero el  mayor atractivo de El Viajero es ser  amigable con el  medio ambiente:  reciclan las aguas lluvias para el aseo y tiene instalados páneles solares para calentar el agua de las  duchas. 

[[nid:495006;http://contenidos.elpais.com.co/elpais/sites/default/files/imagecache/270x/2015/12/entora5oct25-15n1photo04.jpg;left;{The Green House. Ubicada en Normandía, ofrece tour de parapente, uno de sus planes más llamativos.Fotografía: Bernardo Peña |El País}]]Ese valor de cuidado con el medio ambiente sostiene a   The Green House,  una casona empotrada en la loma de  Normandía, al oeste de Cali, con capacidad para 20 personas distribuidas en  dos dormitorios compartidos para 18 huéspedes y solo dos privados.

 Es la propuesta de  Yenny Sánchez y Juan Manuel Alzate, parapentistas, cuyo plan A es poner a volar a sus visitantes con su tour de parapente en Pico de Loro,   Golondrinas o la Hacienda El Paraíso, en El Cerrito, pues muchos se quedan después de la Feria para estos programas. “Ya circula la ola de que Colombia es un país muy bonito, y Cali aún más, y que ya se puede viajar seguro y la gente se siente confiada de venir”, explica Yenny. Y lo comprueban:  sus huéspedes se van diciendo que  Cali es bonita, que su gente es amable, que pudieron conocer y disfrutar la rumba, que no entienden porqué dicen que es insegura y sobre todo, que es de muy buen clima, ya que  vienen huyendo del frío en sus países.  “La tendencia del hostal crece porque sus  tarifas  más económicas, considerando que este turista hace un viaje más largo, por lo general recorre Suramérica hasta  Argentina, entonces es una alternativa que les permite ir más lejos en territorio”, añade Yenny. Y también  en experiencias, porque  no son los turistas de  tomarse la foto en el monumento, sino que disfrutan probar la lulada, la empanada, los sabores propios,  bailar en el salsódromo, en los sitios de rumba,  más en época de Feria, cuando en todas las esquinas se baila. Es un modelo que les  permite conocer  cómo es  ser colombiano, o  ser caleño.   Ella ve muy buena perspectivas para el sector ahora que la Sucursal del Cielo  es más segura y tiene mejor infraestructura: “Estos huéspedes que están rodando van a hablar muy bien de Cali y  se va a llenar”, opina mientras un inglés, un australiano y una argentina, llegan al atardecer a preparar su cena.  El negocio es tan exitoso que el holandés Niels Nieman vino a pasar  dos noches y se quedó dos meses. Regresó, conoció a una caleña, se casó con ella y hace  dos años y medio trabaja organizando tours para turistas como él. “Un hostal es mejor para viajeros solos, así haces amigos. En un hotel, no conoces a nadie”, remata Niels, que en Feria se siente más caleño que nunca. Óscar Guzmán, presidente ejecutivo de Cotelco, Valle, reconoció que los hostales son parte del auge de los establecimientos que prestan el servicio de alojamiento a nivel nacional y en especial, en Cali. “Se debe a que Cali se volvió importante, están llegando muchos extranjeros a la ciudad y algunos tienen una cultura del hospedaje en hostales, nos parece una competencia sana e importante para el desarrollo de la ciudad”, dijo. Aceptó que el crecimiento del sector hotelero va de la mano con los hostales, siempre y cuando tengan el Registro Nacional de Turismo. “No los atacamos ni discriminamos; por el contrario, creemos que complementan muy bien la oferta de turismo para Cali y el Valle”. Admitió que ninguno está afiliado a Cotelco, pero que se estableció una mesa de trabajo con el sector. “Les ofrecemos un curso gratis en bilingüismo (inglés y francés), atención al cliente, etc., en convenio con Asonoc, Anato y Acodres”. Capacidad en alza De acuerdo con Óscar Guzmán desde 2003 a 2014 han llegado varios hoteles a la ciudad, lo que permitió tener   una oferta de 1931 nuevas habitaciones y 1406 más remodeladas, con una inversión de $330.000 millones. Según proyecciones de Cotelco,   para 2017 van a llegar 1462 habitaciones nuevas al Valle del Cauca.En el Valle del Cauca hay 522  establecimientos de alojamiento, de los cuales hay un buen porcentaje de hostales, para un total de 13.926 habitaciones con 22.552 camas que generan más de 7000 empleos directos.En Cali hay 243 establecimientos  de alojamiento, para 7233 habitaciones para 11.142 camas y mucho de estas cifras, las aportan los hostales.Requisitos: estar inscrito en Cámara de Comercio de Cali, tener el Registro Nacional de Turismo y la nueva norma de sostenibilidad que emitió el Ministerio del Turismo, además de los requisitos de Salud Pública, Sayco Acimpro y Secretaría de Gobierno.