Las Ferias de Tuluá vuelven a estar en el foco de la polémica, esta vez por la muerte de un caballo durante el recorrido de la cabalgata, que se realizó en sábado, 14 de junio.
Lo que comenzó como una multitudinaria jornada de apertura de la edición 67 del evento, terminó en una lluvia de críticas, ya que por medio de videos que circulan por redes sociales se puede observar a un caballo desplomado en el barrio Victoria.
El animal, que colapsó en vía pública ante la mirada de asistentes y caballistas, sufrió un infarto fulminante, de acuerdo con el reporte entregado por el equipo veterinario dispuesto para la actividad.
A pesar de los múltiples intentos por reanimarlo, el equino falleció en el lugar.
Comunicado de las autoridades locales
Pese a la polémica, la Alcaldía de Tuluá calificó la cabalgata como exitosa, destacando que participaron cerca de mil jinetes provenientes de diferentes municipios del Valle del Cauca y de otras regiones del país.
Según los reportes, la feria destinó un robusto dispositivo compuesto por más de mil uniformados, por lo que la administración local resaltó la buena organización y el dispositivo de seguridad, lo cual les permitió, según destacó, "que todo transcurriera sin mayores contratiempos”.
Y en medio de su reporte, explicaron superficialmente lo que sucedió con el equino, por lo que no revelaron si van a investigar el caso o en su defecto, aplicar medidas sancionatorias por el mismo.
“Durante el desarrollo de la cabalgata, un equino fue retirado preventivamente por el equipo veterinario tras evidenciar signos de agotamiento. Lamentablemente, pese a los esfuerzos del equipo médico veterinario, el animal falleció”, declaró la entidad.
La situación encendió las alarmas entre colectivos animalistas, quienes cuestionaron nuevamente la realización de este tipo de eventos en los que, según ellos, los animales son expuestos a estrés extremo, altas temperaturas y cargas excesivas durante trayectos largos sobre el pavimento.
Asimismo, medios locales reportaron que otros caballos salieron afectados con evidentes lesiones.
El caso se suma a un historial de incidentes similares. En al menos tres ediciones recientes de la feria se reportaron muertes o lesiones de caballos durante las cabalgatas. En el año 2028, un cuadrúpedo sufrió un infarto y murió. En 2022, por ejemplo, se documentó el deceso de otro equino y la participación de menores de edad montando caballos. En 2023, dos caballos murieron, uno de ellos al caer a un río.