La Universidad de Harvard y el Instituto de Tecnología de Massachusetts (más conocido por sus siglas en inglés, MIT) aseguran que han dado con una pastilla que puede revertir el envejecimiento celular; es decir, dar marcha atrás.

Las perspectivas de este nuevo tratamiento no se han centrado sólo en la aparición de canas o arrugas, sino que los autores de su investigación apuntan a su utilidad en un posible abordaje para enfermedades tan peligrosas como el alzhéimer o el párkinson.

Los resultados de esta investigación han sido publicados en la revista científica Aging y se ha basado en los descubrimientos sobre las células madre que consiguieron que el doctor Shinya Yamanaka se alzase con el Nobel de Medicina en 2012.

Estos descubrimientos ya se han aplicado en varias investigaciones con éxito y, ahora, los autores de este estudio han buscado moléculas con la capacidad de rejuvenecer células. Para ello, las probaron en diferentes células en fases diversas de envejecimiento.

Las perspectivas de este nuevo tratamiento no se han centrado sólo en la aparición de canas o arrugas, | Foto: Libre de derechos

Unas de las más importantes fueron las células senescentes, que son aquellas que ya tienen el ADN dañado, pero que no se autodestruyen y contribuyen al envejecimiento y a la aparición de enfermedades vinculadas a él.

En total, probaron hasta seis combinaciones de sustancias y terminaron logrando rejuvenecer ratones en menos de una semana. Los científicos también han celebrado conseguir este efecto con sustancias químicas porque son más baratas y más fáciles de aprobar.

“Hasta ahora, este proceso requería terapia génica, lo que limitaba su uso generalizado”, ha explicado David A. Sinclair, catedrático de Genética de la Facultad de Medicina de Harvard y autor principal del estudio.

“Este nuevo descubrimiento da la posibilidad de revertir el envejecimiento con una sola píldora, con aplicaciones que van desde la mejora de la vista hasta el tratamiento eficaz de numerosas enfermedades relacionadas con la edad”, concluyen.

Arándanos para la memoria

Ahora bien, los arándanos, en concreto, tienen un alto contenido en fibra, minerales, vitaminas y antioxidantes, especialmente en unos compuestos llamados antocianinas, que los hacen no solo ideales para una dieta saludable, sino para ayudar a proteger el cuerpo contra la enfermedad y mejorar la salud cerebral.

Ahora bien, un estudio realizado por científicos de la Universidad de Cincinnati, en EE. UU., ha arrojado luz sobre este tema recientemente. En él se evidencia que el consumo periódico de estas bayas en personas de mediana edad puede minimizar las probabilidades de padecer demencias en la última etapa de la vida.

De hecho, estos científicos fueron un paso más allá. Tomaron como referencia a un grupo muy concreto: adultos con obesidad que ya sufrían un ligero deterioro cognitivo y que tenían 50 años de edad.

Los arándanos, en concreto, tienen un alto contenido en fibra, minerales, vitaminas y antioxidantes. | Foto: Getty Images

Tras consumir una taza de arándanos al día, estas personas no solo ralentizaron su proceso de deterioro, sino que vieron cómo mejoraban sus capacidades con el paso del tiempo respecto al grupo de control que no consumió esta fruta.

Además, los beneficios del arándano son variados. Más allá de sus buenos resultados a la hora de cuidar del cerebro de las personas, también son muy positivos para la salud en general, e incluirlos en la dieta parece un excelente método preventivo y curativo.

Las nueces son alimentos que contiene ácidos grasos esenciales omega-3 y vitamina E, los cuales ayudan a fortalecer el cerebro. | Foto: Foto: Getty images.

Otros alimentos para la memoria

Nueces
  • Las nueces son alimentos que contiene ácidos grasos esenciales omega-3 y vitamina E, los cuales ayudan a fortalecer el cerebro.
  • Según una investigación publicada en Journal of Nutrition, también contienen numerosos fitoquímicos que brindan beneficios potenciales a la salud del cerebro.
  • En concreto, y de acuerdo a los datos de esta publicación, los compuestos polifenólicos que se encuentran en las nueces ayudarían a disminuir la carga oxidante e inflamatoria en las células del cerebro. Además, favorecen la señalización interneuronal y participan en la neurogénesis.
Ginkgo biloba
  • Los productos naturales como Ginkgo Biloba aún no son aprobados como tratamiento de los problemas cerebrales. Sin embargo, sus extractos sí han sido objeto de ensayos, ya que tienen beneficios contra el deterioro cognitivo y los problemas de memoria.
  • Una publicación de Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine determinó que el extracto de Ginkgo Biloba puede contribuir a una mejora de los síntomas del deterioro cognitivo asociado a la edad.
Maca
  • Uno de los estudios recientes, publicado en Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine señala que la maca tiene efectos neuroprotectores que, entre otras cosas, mejoran las funciones cognitivas, la coordinación motora y la capacidad de resistencia.
  • Son embargo, como esta investigación fue hecha en roedores, se requieren más evidencias.