El presidente Gustavo Petro anunció este lunes que el nuevo salario mínimo en Colombia, para el 2026, será de $2.000.000, incluido el auxilio de transporte.

Esto significa que es un aumento del 23.7%, según lo declaró el mandatario en la alocución presidencial de las 7:00 de la noche. De esta manera, el salario mínimo en Colombia que estaba en 1.423.500, queda en 1.746.882, sin incluir el auxilio de transporte otorgado de ley.

Explicó el presidente que esta decisión se da con la finalidad de tener un salario mínimo vital para “democratizar la riqueza” y aumentar el presupuesto y el empleo de las familias colombianas, al insistir en que “no le estamos quitando un peso a nadie”.

Pese a que esta decisión se dio por decreto tras la falta de acuerdo entre los empresarios y el sector trabajador, el presidente defendió este aumento.

Gustavo Petro (izq.), presidente de Colombia, y Antonio Sanguino, ministro de Trabajo, en Cartagena, el 29 de diciembre de 2025. | Foto: Ovidio Gonzalez S

“Me van a llover de los sectores más megarricos y retardatarios insultos y decir que nos equivocamos o que se paralizará la economía, pero tenemos la tasa de desempleo más baja de todo el siglo”, defendió el presidente.

Insistió en su postura de que aumentar el salario mínimo “no es un costo”, sino que “son medidas que van a reducir la pobreza y aumentar el empleo porque aumenta la demanda y los empresarios van a vender más, necesitarán más trabajadores”.

Agregó en sus declaraciones que lo que el país debe buscar es aumentar más el salario junto a la productividad, para disminuir la jornada laboral.

Antes de su alocución, Petro se pronunció en su red social de X, afirmando que se iba a adelantar a la critica y que “toda la información estadística muestra que es al contrario la correlación econométrica, entre más sube el salario mínimo el desempleo baja”.

Además, “es lo contrario de la estafa ideológica del neoliberalismo que es lo único que estudian los estudiantes de economía. Hasta en la Nacional prohibieron la economía científica solo enseñan ideologías de negociantes como dijera Aristóteles: crematística”.

Antonella Petro, hija del presidente, Gustavo Petro (en el centro), y Antonio Sanguino, ministro de Trabajo, en Cartagena, el 29 de diciembre de 2025. | Foto: Ovidio Gonzalez S

También aseguró que “como dijo el economista científico Piero Sraffa, la inflación no es sino una lucha por la distribución de la riqueza. Son los y las trabajadoras, las que generan la riqueza. El COVID demostró está ley científica de la economía.

Más adelante, el presidente sostuvo que “el gobierno no permitirá que los empresarios trasladen el aumento salarial al aumento de precios al consumidor, sus ganancias aumentarán no por precios mayores sino por mayores ventas y más productividad”.

Luego de la alocución, solo puso un mensaje que decía: “uno de mis principales defectos es ser ingenuo y creer mucho en los demás, pero creer en el pueblo no es un error, es un acierto siempre”, indicó en la misma red social.

*Con información de Colprensa.