Después de la condena de 12 años de prisión domiciliaria, en primera instancia, al expresidente Álvaro Uribe Vélez, varios políticos han catalogado el proceso como “politizado”, entre ellos la senadora Paloma Valencia, quien arremetió contra el presidente Gustavo Petro.
“Advierto con preocupación que el presidente nos amenaza, nos pone una lápida y nos señala para que la criminalidad actúe sobre nosotros”, aseveró en primera instancia la funcionaria en su cuenta de X.
Esto después de que el mandatario Gustavo Petro, indicara que aquellos que piden ayuda a los Estados Unidos para el caso del expresidente van en contra de la ley colombiana. “Quienes van a hacer “lobby” van es contra la justicia y contra Colombia”.
Además, el Presidente calificó a la derecha de “apátridas”, debido a la presión que, según el mandatario, viene aplicando la oposición hacía la justicia colombiana durante todo el proceso.
Ante estos hechos, la senadora mencionó que ella y demás funcionarios buscarán la defensa del expresidente tras la condena por presuntas irregularidades en la debida diligencia.
“Colombianos iremos a buscar las instancias internacionales para defender al presidente Álvaro Uribe Vélez de los abusos de este gobierno, y un proceso politizado y sin garantías. Buscaremos justicia”.
Caso Uribe
Cabe recordar que tras la decisión del Juzgado 44 del Circuito Penal se confiere una condena de 12 años de prisión domiciliaria en contra del expresidente Álvaro Uribe Vélez, por delitos asociados a soborno de testigos y fraude procesal.
A pesar de ello, el exmandatario apeló dicha decisión, considerando que existen una serie de elementos que no comprueban su actuación de manera indebida ante los principios de la ley.
Por tal motivo, desde la defensa de Uribe Vélez se hizo una solicitud para aumentar el plazo de la presentación de la apelación.
Lo que concluyó la jueza Sandra Heredia es que Uribe buscó la manipulación de al menos tres testigos, Juan Guillermo Monsalve, Carlos Enrique Vélez, alias Víctor, y Eurídice Cortés, alias Diana. Pero también sabía que se estaba engañando a la justicia con cartas falsas.
Por lo pronto, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) aún no ha sido notificado de la orden de detención domiciliaria en contra del condenado expresidente Álvaro Uribe.
De esta manera, abogados penalistas explicaron que el expresidente sería vigilado por la cárcel de Bellavista debido a que es el más cercano a su residencia en Rionegro, municipio del departamento de Antioquía.