En medio de las tensiones políticas, Gustavo Petro tomó la decisión de expulsar a la delegación de Israel en Colombia, luego de que este indicara que dos colombianas habrían sido detenidas mientras viajaban en la flotilla humanitaria Global Sumud, por parte del ejército israelí.

“Si es cierta está información, hay un nuevo crimen internacional de Netanyahu. El tratado de libre comercio con Israel se denuncia de inmediato. Sale toda la delegación diplomática de Israel en Colombia”, arremetió el Jefe de Estado colombiano.

Asimismo, el mandatario indicó que la Cancillería de Colombia tendrá que tomar todas las medidas correspondientes tras este hecho. “Hacer todas las demandas respectivas, incluso en la justicia israelí. Invito a abogados internacionales que se pongan al servicio de Colombia, al lado de nuestros abogados”, mencionó.

El presidente Petro completó su trino asegurando que el batallón Guardia Presidencial cumplirá su función de ejercer la seguridad de la Casa de Nariño”, considerando la tensión que también existe con Estados Unidos.

De acuerdo con el comunicado de la Flotilla Global Sumud, las colombianas que hacen parte de la tripulación son Manuela Bedoya y Luna Barreto, integrantes del colectivo H10, quienes viajaban con el propósito de entregar suministros médicos y visibilizar el bloqueo impuesto sobre Gaza.

La iniciativa, de carácter pacífico, forma parte de una campaña global que busca denunciar las restricciones impuestas por Israel y promover la solidaridad internacional con el pueblo palestino.

La flotilla representa la resistencia civil frente a una política de asfixia que viola derechos fundamentales. Nuestra misión es humanitaria y legítima”, señala el comunicado.

La entidad aseguró que se trata de un hecho en contra de los derechos fundamentales. | Foto: El País

También hizo un llamado a los gobiernos y organismos multilaterales para que se pronuncien ante lo que califican como una “agresión injustificada” y reiteran la urgencia de levantar el bloqueo que afecta a más de dos millones de personas en Gaza.

La participación colombiana en esta acción refuerza el creciente involucramiento de sectores sociales del país en causas internacionales de derechos humanos. Bedoya y Barreto, conocidas por su activismo en defensa de la paz y la justicia global, han sido voceras de múltiples iniciativas en América Latina que conectan las luchas locales con escenarios internacionales.

El paradero actual de los integrantes de la flotilla permanece incierto, y organizaciones de derechos humanos han exigido garantías para su seguridad y la liberación inmediata, en caso de detención.