Una decisión judicial que ha generado amplio debate en el país fue adoptada el pasado 1 de agosto por la Juez 44 Penal del Circuito de Bogotá, quien ordenó la privación inmediata de la libertad del expresidente Álvaro Uribe Vélez.
El fallo fue cuestionado por el Grupo de los 38, un colectivo de juristas que expresó su preocupación frente a lo que considera una medida sin justificación jurídica suficiente.
En un comunicado, los firmantes señalaron que la detención se produjo sin que exista sentencia en firme y que esta acción contraviene tanto la Constitución como los estándares internacionales en materia de derechos humanos.
Advirtieron que la medida no cumple con los requisitos legales que permitirían aplicar una prisión preventiva, la cual debe responder a riesgos de fuga, obstrucción a la justicia o peligrosidad del acusado.
Críticas a la motivación de la sentencia
El Grupo de los 38 argumentó que el fallo carece de fundamentos sólidos para justificar una medida tan extrema. Según su análisis, la sentencia invoca presuntos actos dilatorios por parte de la defensa de Uribe, pero no aporta un análisis jurídico que respalde cómo estos actos habrían puesto en riesgo el desarrollo del proceso penal.
Los juristas recalcaron que el ejercicio de los recursos legales por parte de la defensa es un derecho protegido por la Constitución y no puede considerarse una causa legítima para restringir la libertad. Además, recordaron que durante todo el proceso el expresidente Uribe asistió a todas las citaciones judiciales, por lo cual estiman que no existe riesgo de fuga comprobado.
Otro de los puntos cuestionados es la aparente desigualdad ante la ley que se habría configurado con esta decisión. En procesos similares, los acusados han podido enfrentar los cargos en libertad. Por ello, los firmantes advirtieron que el caso podría estar marcando un precedente de “pena anticipada”, lo cual socava la presunción de inocencia.
Llamado a revisión de la decisión
El comunicado también denunció lo que consideran una posible politización del proceso. Señalaron que el lenguaje de la sentencia y la aplicación de una medida excepcional, sin fundamentos jurídicos claros, ponen en entredicho la imparcialidad judicial.
En ese sentido, solicitaron a las instancias superiores del poder judicial que revisen con independencia e imparcialidad la decisión, para proteger las garantías del debido proceso.
La misiva concluye con un llamado urgente a restablecer los derechos fundamentales que, según los firmantes, fueron vulnerados con esta medida. También advierten sobre el riesgo que supone para el Estado de derecho el uso de la justicia con fines de persecución política.
La carta fue firmada por: Amir Nayi Abushihab Collazos, José Vicente Ángel, Oliva Aristizábal, Pablo Arteta, Carolina Azuero, Jorge Luis Barone, Enrique Berrío Mendoza, Carmenza Betancourt, Gloria María Borrero, Everth Bustamante, Hilda Caballero, Germán Calderón España, Magdalena Caro, Gustavo Castro Guerrero.
Amy Clarckson, Víctor Daniel Chalela, Javier Cortázar, María Cristina Cuellar, Luis Gabriel Chávez, Orieta Daza, Ángela Echeverri Arcila, Sebastián Erazo, José Alfredo Escobar Araújo, Rodrigo Escobar Gil, Abdón Espinoza Mauricio Fajardo, Juan José Gaitán Gómez, Bernardo Henao Jaramillo, Said Idrobo Gómez, Germán Alberto Herrera, Fabio León, Ernesto de Francisco Lloreda, Francisco José Lloreda, Carlos Márquez Escobar, Carlos Medina Pablo Michelsen, Magdalena Mojica, Ricardo Moreno Moreno, Juan Navarrete, Luis Camilo Osorio, Martín Alonso Pinzón, María Clara Posada Caicedo.
Juan Carlos Prías, Ángela María Orozco, Alejandro Ramírez Cariz Ramírez, Consuelo Ramírez, María Victoria Rodríguez, María del Pilar Rocha, Juan Manuel Rogelis, María Claudia Rojas, Álvaro Diego Román, Patricia Salgado, Gilberto Sanclemente, Camila Santamaría, Constanza Silva Klein, María Isabel Silva, Cristian Stapper, Freddy Succar Chediac, Amadeo Tamayo, José F. Torres, Blanca Eugenia Uribe, Jaime Andrés Usuga, Francisco J. Valencia Puerta, Juan Álvaro Vallejo Tobón, José Luis Villafañe.
Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País*