En una carta enviada al secretario de Estado, Marco Rubio, que tiene la firma de 17 congresistas estadounidenses demócratas, rechazan las declaraciones del funcionario en apoyo al expresidente Álvaro Uribe en su proceso judicial, al considerar que es un irrespeto a la justicia colombiana.
“El pueblo de Colombia merece algo mejor del gobierno de Estados Unidos… El verdadero Estado de derecho exige que ninguna persona, sin importar su estatus o posición en el gobierno, sea considerada por encima de la ley”, indica el documento.
Y añade: “Que el secretario de Estado de los Estados Unidos utilice su cargo para amplificar una narrativa falsa sobre el sistema judicial en Colombia no solo socava el respeto por el Estado de derecho, sino que también disminuye la credibilidad de Estados Unidos”.
El texto fue firmado por James McGovern, Delia Ramírez, Eleanor Holmes, Rashida Tlaib, Nydia Velázquez, Jonathan Jackson, Alexandria Ocasio-Cortez, Greg Casar, Jan Schakowsky, Jesús García, Henry Johnson, Jr Mark Pocan, Ilhan Omar, Pramila Jayapal, Richard Neal, Mark DeSaulnier y Lloyd Doggett.
Los congresistas demócratas defendieron la gestión de la jueza que llevó el caso contra el expresidente: “De acuerdo con los procedimientos del sistema judicial colombiano, la jurisdicción del caso estuvo sujeta a una asignación aleatoria. En abril de 2024, el caso fue asignado a la jueza Sandra Heredia. Heredia llevó a cabo 69 audiencias públicas a lo largo de 475 días y emitió una sentencia de más de 1,000 páginas, en la que abordó con gran detalle las pruebas y los argumentos de la defensa, y cuya lectura de la sentencia le tomó casi 10 horas”.
“El caso, que se extendió por 13 años, bajo tres presidentes colombianos diferentes y con fiscales designados por gobiernos de diversas posiciones ideológicas, no es el resultado de la agenda política de una persona o de un partido, sino un reflejo de la imparcialidad objetiva de las instituciones judiciales en Colombia”, menciona el texto.
Además, recordaron que el poder judicial colombiano ha demostrado una trayectoria de independencia judicial y de control frente al poder Ejecutivo y que, de hecho, informes anteriores sobre derechos humanos del Departamento de Estado han confirmado la independencia judicial de Colombia”.
La carta se dio en respuesta a un pronunciamiento que tuvo Marco Rubio del pasado 28 de julio, cuando sostuvo que el jefe natural del Centro Democrático, Álvaro Uribe, era víctima de “la instrumentalización del poder judicial por parte de jueces radicales”.