Carlos Camargo Asís, exdefensor del Pueblo, fue elegido este miércoles como nuevo magistrado de la Corte Constitucional por la plenaria del Senado con un total de 62 votos, en una de las votaciones más reñidas y tensas de los últimos meses, que se definió por un estrecho margen y en medio de una fuerte puja política entre el Gobierno y la oposición.
Tras una sesión que se extendió por varias horas, Camargo Asís, ternado por la Corte Suprema de Justicia, aseguró el respaldo necesario entre los 103 senadores habilitados, para ocupar la silla que dejó el magistrado José Fernando Reyes.
Su principal rival, la magistrada María Patricia Balanta, quien aglutinó el apoyo del oficialismo, alcanzó 41 votos.
Por su parte, el jurista Jaime Humberto Tovar Ordóñez, cuya candidatura fue objeto de fuertes presiones políticas, no consiguió ningún sufragio.
Este resultado se dio luego de superar una extensa discusión sobre los impedimentos presentados, la elección inició oficialmente sobre las 2:04 de la tarde de este miércoles 3 de septiembre.
Intervenciones durante la elección
Durante su intervención, María Patricia Balanta, quien fue la primera en presentar su propuesta ante los senadores, resaltó que llegaba “sin sesgos ni compromisos políticos, sin alianzas ni ideologías como se insinúa, sin que me desprenda de mi autonomía e independencia”.
La abogada, con trayectoria como juez municipal, juez de circuito y magistrada del Tribunal Superior de Buga, se describió como defensora del “orden justo” y reafirmó su compromiso con los “principios constitucionales”.
Por su parte, Carlos Camargo, exdefensor del Pueblo, afirmó que llegar a la Corte Constitucional representa para él “un deber con el país, para contribuir a la defensa del orden constitucional”.
Señaló que, a lo largo de su trayectoria, ha tenido “el privilegio de recorrer el territorio nacional y entender sus necesidades”, lo que le ha permitido trabajar por la “consolidación de una justicia cercana y confiable”.
Camargo destacó que “la Constitución es un pacto vivo que guía la democracia”. Y recordó que, desde la Defensoría del Pueblo, trabajó en temas como la reforma a la Ley de Víctimas y la implementación del Acuerdo de Paz.
También señaló que la Corte Constitucional “ocupa un lugar excepcional en el entramado del modelo jurídico de Colombia”, por lo que consideró indispensable que el tribunal reafirme su compromiso con la democracia, actuando siempre con independencia.
El último ternado que se presentó fue Jaime Tobar, quien inició enfatizando que la elección de un magistrado de la alta corte “no puede convertirse en un escenario de polarización política o ideológica”, y advirtió que una “corte fragmentada por intereses pierde la confianza ciudadana”.
“La Corte Constitucional debe unirnos como nación, debe estar comprometida con la justicia y la defensa de nuestra Carta y con cada ciudadano que confía en que dicha corte es garante de protección”, dijo el abogado, al defender también la separación de poderes.