La historia de Niyireth Pineda Marín es la de muchos colombianos: viajó a España hace siete años en busca de mejores oportunidades para ella y para su hijo, hoy de 12 años. El Ejército español le brindó esa posibilidad de forjarse un futuro mejor, lejos de un país en conflicto como Colombia. Pero Niyireth perdió la vida en Afganistán el fin de semana anterior cuando el convoy en el que viajaba fue atacado con cargas explosivas. Su sueño quedó truncado. Como la soldado Pineda, cientos de extranjeros se han enrolado en el Ejército español, donde se convierten en los héroes y heroínas que libran la guerra contra el terrorismo internacional. El homenaje a Niyireth, quien será sepultada en Pereira, lo hizo la ministra de Defensa de España, cuando pidió que a nadie se le olvide “que los militares están en Afganistán, para que aquel país no vuelva a convertirse en refugio de terroristas y para garantizar la seguridad mundial”.