Mientras las lluvias continúan en Cali y en el Valle, aumentan las alertas por el aumento en el caudal de los ríos por las inundaciones que se están produciendo y por los riesgos en que se encuentran las zonas de ladera.
La perspectiva es que esta temporada invernal no será pasajera y aún se extenderá por 45 días más, por lo cual es necesario aumentar las precauciones para las emergencias que se puedan presentar.
La vigilancia está puesta sobre el río Cauca, que el miércoles superó los 10 metros de altura y se ha desbordado en algunos lugares a su paso por el Valle.
Y si bien se reconoce la labor de Emcali con la limpieza de los canales de aguas lluvias de la ciudad, esos trabajos no son suficientes para evitar contingencias, como quedó en evidencia el jueves anterior cuando varios sectores de la capital vallecaucana se inundaron luego de un fuerte aguacero.
La vigilancia sobre las laderas tampoco se puede descuidar porque como bien se sabe, los riesgos por la inestabilidad de los terrenos así como por los asentamientos ilegales que albergan aumentan durante las épocas de lluvia.
Ojalá las predicciones sobre un invierno prolongado en Cali y el Valle, agudizado por el fenómeno de La Niña, no se cumplan.
Pero es más que urgente estar bien preparados y mantener las medidas preventivas para evitar que se repitan tragedias por causa de las lluvias.