Un sitio interesante y acogedor como ‘El parque de las piedras’ no puede abandonarse, ni debe permitirse que se vandalice, como ocurrió el jueves cuando las esculturas aparecieron con grafitis y afectadas.

Inaugurado hace once meses entre el CAM y al Bulevar del Río, ese espacio que hace homenaje al río Cali y a los otros seis afluentes que circundan la ciudad, debe ser conocido y apropiado por los caleños.

Para ello cuenta con caminos peatonales, amplios espacios verdes y muestras artísticas en piedra que le dan identidad y belleza.

Cuidar y proteger el parque es responsabilidad de las autoridades así como de los ciudadanos, que son los llamados a reportar los hechos vandálicos y a quienes pretenden hacerle daño.

Espacios como El Parque de las Piedras les pertenecen a los caleños, por ello es importante convertirlos en espacios atractivos, promover su visita y evitar que el abandono los haga fácil presa de los vándalos.

Así se ayuda a conservarlos y a generar una cultura ciudadana que comprometa a la sociedad a protegerlos y evitar que queden a merced de quienes quieren destruirlos o convertirlos en epicentro de delincuencia.

A las autoridades hay que pedirles que mejoren la seguridad en el parque, se mantengan vigilantes y promuevan su utilización como ocurrió en la Feria del Libro de Cali.