La captura de once personas dedicadas a la explotación de oro en el Pacífico caucano, demuestra la labor organizada de las Fuerzas Militares para combatir la minería ilegal. Pero también da una idea del tamaño del negocio clandestino que operaba en los municipios de Timbiquí, Guapi y López de Micay. Entre los detenidos figuran funcionarios de las alcaldías y miembros de la Armada Nacional que, apoyados por las Farc, sobornaban al personal del aeropuerto de Palmira y Guapi para permitir el paso de oro, dinero en efectivo y partes de maquinaria. Por eso, el operativo en el que también fueron destruidas 20 retroexcavadoras, es un éxito que se le debe reconocer a las autoridades en su lucha contra esta actividad.Una labor que tienen que continuar hasta llegar a sectores como el norte del Cauca donde la minería ilegal ha sido inclemente y devastadora.