El lenguaje corporal y la forma de hablar influyen poderosamente en tu existencia.

Modula tu lenguaje corporal de forma que demuestre más confianza en ti misma.

Trata de mostrarte erguida, con una postura relajada y abierta. Mira al frente o hacia arriba.

Del mismo modo, empieza a comunicarte con asertividad en lugar de con inhibición.

Utiliza un tono de voz adecuado, ni muy bajo ni muy elevado, evita usar muletillas negativas.

Haz pausas que te ayuden a mostrarte sereno, y muestra tus ideas de forma clara y firme.

Dile adiós a los pensamientos negativos y los cambias por otros más adaptativos.

En lugar de ‘no podré hacerlo’ decreta con determinación ‘lo haré lo mejor que pueda’. ¡Ámate!